El expresidente ejecutivo de Telefónica, César Alierta, ha fallecido este miércoles tras varias horas ingresado de gravedad en un hospital de Zaragoza. Alierta, de 78 años de edad, sufría problemas respiratorios tras el empeoramiento de su estado de salud en las últimas semanas, y tras su muerte Telefónica, compañía que presidió entre julio del 200 y abril de 2016, ha lamentado la pérdida de uno sus personajes clave.

Además de ocupar la presidencia de Telefónica durante 16 años, el empresario también se encargó de liderar la empresa Tabacalera desde 1996 por mandato de José María Aznar hasta su privatización, y fue uno de los principales accionistas del club de fútbol Real Zaragoza.

“César Alierta Izuel ha fallecido hoy en Zaragoza a los 78 años. Siendo uno de los grandes empresarios de España, reconocido y premiado internacionalmente, la historia de Telefónica no podría entenderse sin su ejemplo, su legado personal y profesional, su visión estratégica y su incansable vocación de hacer de Telefónica el lugar en el que fuera posible hacer un mundo más humano, conectando la vida de las personas”, ha comenzado Telefónica su comunicado.

Después de hacer un repaso por su trayectoria educativa y profesional, la compañía que presidió 16 años ha querido recordar su objetivo al frente de Fundación Telefónica y de Fundación ProFuturo: “En su última etapa al frente de Fundación Telefónica y de Fundación ProFuturo se impuso como misión hacer un mundo mejor, más justo, solidario e inclusivo, a través de la digitalización y la educación. Sabía y defendía que la educación es la clave del progreso y como a él le gustaba decir ‘la educación es la principal herramienta de cambio para la transformación y la inclusión social’”.

“Por eso, su objetivo fue contribuir a mejorar la educación de niños y niñas vulnerables de todo el mundo para darles una opción de futuro. Un mensaje que trasladaba incansablemente a todos aquellos que querían sumarse a su causa. Su labor en Fundación Telefónica y Fundación ProFuturo ha llevado a ambas instituciones a las cotas más altas de excelencia y ha contribuido a transformar la vida de las personas dejando un legado inigualable”, han añadido a su respecto.

El Consejo de Administración de Telefónica, los Patronatos de Fundación Telefónica y Fundación ProFuturo, encabezados por el presidente de Telefónica, José María Álvarez-Pallete, han lamentado profundamente su pérdida y han destacado la visión estratégica y el enorme legado que Alierta deja en la compañía, así como su ingente labor social y educativa como responsable de Fundación Telefónica y de Fundación ProFuturo en los últimos años.

Alierta ha dejado una huella imborrable. Además de su gran bagaje profesional, siempre será recordado como un trabajador incansable, gran estratega, amigo de sus amigos, enamorado de su Zaragoza natal, fiel y cercano, comprometido y generoso”, han subrayado.

Por su parte, Álvarez-Pallete ha querido dedicarle unas palabras personalmente: “Es un día triste para la familia Telefónica. Todos somos depositarios del inmenso legado que nos deja César Alierta, un corazón abierto de par en par, apasionado, inteligente y valiente. Su visión de futuro y su intuición le llevaron siempre a intentar cambiar el mundo a mejor. El profundo amor por su Zaragoza natal le permitió pasear su tierra por todos los rincones del mundo. Muchas gracias, querido, amigo”.

Además, Telefónica ha convocado este jueves al mediodía a todos los trabajadores en las diferentes sedes de la operadora en todo el mundo para guardar un minuto de silencio en memoria de César Alierta.

Conviene recordar que Alierta jugó un papel clave en la expansión internacional de Telefónica tras su privatización a finales del siglo XX por el Gobierno popular de José María Aznar. De hecho, el proceso de privatización de la compañía terminó en 1999, hasta ese momento en manos del Estado, y en julio del 2000 el Gobierno de Aznar nombró a Alierta como nuevo presidente de la teleco, en sustitución de Juan Villalonga. Un cargo en el que el directivo se mantuvo hasta 2016 y desde el que impulsó el papel de la compañía en Latinoamérica, al otro lado del charco, y el carácter digital de la compañía. Alierta se ocupó de dar los primeros pasos en una Telefónica que, todavía a día de hoy, se mantiene en el camino para convertirse en una teleco del siglo XXI.