Magyar Vagon, el grupo húngaro interesado en hacerse con el 100% de Talgo a través de una oferta pública de adquisición (opa), ya comunicada oficialmente a la CNMV, ha revelado sus planes de futuro en la compañía a los sindicatos. Durante una reunión celebrada en la tarde del lunes, de “carácter informal” y meramente informativa tal y como ha podido saber ElPlural.com en fuentes de UGT, una delegación de la empresa húngara ha trasladado sus intenciones en el fabricante de trenes tanto a la dirección de Talgo como a los sindicatos representativos de la plantilla. Todo ello en medio de los rumores de contraopa, cada vez más fuertes, por parte de Stadler, otra de las empresas interesadas en hacerse con el negocio de Talgo.
Una delegación de la empresa húngara ha viajado a España para reunirse con los sindicatos y con la dirección de Talgo y, como asegura CCOO en un comunicado al que ha tenido acceso ElPlural.com tras la reunión, también con otros protagonistas indirectos de la operación como el Gobierno. La comitiva húngara ha mantenido una serie de reuniones claves para seguir con su plan este lunes en Madrid y ha revelado un detalle más que relevante para los sindicatos de Talgo: la fecha en la que comunicará oficialmente a la CNMV todos los detalles de la opa. Un paso imprescindible para continuar con sus planes que el fabricante de trenes ha marcado en el calendario para el próximo domingo 7 de abril.
Durante la reunión celebrada con los sindicatos y la dirección de Talgo, el grupo húngaro trasladó un mensaje de calma y tranquilidad a los trabajadores de la compañía, según UGT, asegurando el mantenimiento “total” del empleo y de las plantas españolas, con un mensaje de estabilidad para “todos los puestos de trabajo a largo plazo”. Un mensaje de compromiso mientras, fuera de esa reunión, Talgo se disparaba en bolsa por los rumores, cada vez más fuertes, de contraopa por parte de Stadler, otro de los interesados en hacerse con el negocio del fabricante de trenes.
El proceso de compra de las acciones de Talgo por parte de Magyar Vagon consta de varios plazos y, según ha confirmado la dirección a los sindicatos presentes en la reunión, CSIF, UGT y CCOO, el próximo paso del desembarco de los húngaros en la empresa española pasa por la entrega de la memoria de la opa, con todos los detalles, en apenas 15 días a la CNMV. A partir de aquí, el Gobierno tendría que analizar y estudiar la oferta pública de adquisición de acciones lanzada por Magyar Vagon sobre el 100% de Talgo para dar su visto bueno, o no, a la operación.
Talgo, estratégica para el Gobierno
Y es que el Gobierno ha dejado claro que el fabricante de trenes es una empresa estratégica para la sociedad española, o al menos así lo ha dejado patente en varias intervenciones el ministro de Industria, Jordi Hereu. Sin embargo, el futuro de Talgo no solo está en manos de Hereu, sino que el Ejecutivo ha creado una especie de comisión interna en la que también participan otros departamentos, como el Ministerio de Transportes -con Óscar Puente revelando la intención del Gobierno de bloquear la opa, información que luego matizó- y el Ministerio de Economía, Comercio y Empresa, liderado por Carlos Cuerpo.
Realmente es este departamento el que tiene la última palabra sobre la apuesta de Magyar Vagon sobre Talgo, así como cualquier otra empresa que se considere estratégica para el Gobierno, por tener las competencias para ello. Un cambio que se produjo con la marcha de Nadia Calviño a la presidencia del BEI a finales de diciembre y que, en la práctica, supuso el traspaso de las competencias de Comercio del departamento de Industria al de Economía. De hecho, según el medio húngaro Index, el grupo inversor húngaro ya habría presentado la información detallada correspondiente a las "autoridades españolas" para seguir adelante con la opa sobre el 100% de Talgo. Una información que, por el momento, no confirman desde ninguno de los departamentos del Ejecutivo encargados de analizar los detalles de la operación.
La reunión entre la comitiva húngara y los sindicatos de Talgo ha contado con la participación de dos miembros por cada sección sindical de la compañía, CSIF, UGT y CCOO. El grupo inversor húngaro ha dejado claro su compromiso para mantener las inversiones y los contratos actuales de la compañía en España, así como mantener la compañía con su nombre y su sede en España. Es decir, Talgo seguiría siendo una empresa española a pesar del traspaso de negocio y no pasaría a ser la húngara Talgo. Desde el punto de vista positivo, Magyar Vagon se ha mostrado abierto a consolidar sus fábricas, situadas en Hungría, gracias a la transmisión de conocimientos técnicos por parte de Talgo. Una información que desde UGT han recibido como un complemento a la unidad de negocio de la empresa.
La reunión terminó con una aparente buena impresión de Magyar Vagon como grupo inversor interesado en hacerse con el negocio total de Talgo. Y es que los sindicatos de Talgo mantienen que la unión de las dos empresas conseguiría que el grupo resultante tras la opa pudiera optar a concursos en ofertas más competitivas y superiores. En otras palabras, el traspaso del 100% del negocio de Talgo al grupo húngaro ofrecería unas “evidentes ventajas” ante la competencia, según fuentes de UGT presentes en la reunión, dado el momento actual y las expectativas del mercado ferroviario a futuro.
CCOO no descarta el bloqueo del Gobierno a la opa húngara
Por otro lado, desde CCOO Industria han aprovechado la reunión para pedir a Patentes Talgo, al grupo húngaro Magyar Vagon y también al Gobierno de España “agilidad y claridad en la toma de decisiones” sobre el futuro de Talgo. El sindicato, al igual que los otros representativos de la plantilla de la compañía, han puesto sobre la mesa el mantenimiento del empleo y la estabilidad a futuro del fabricante de trenes como objetivos principales para continuar con la opa de Magyar Vagon sobre el 100% de Talgo.
Desde CCOO reflejan una situación de “máxima preocupación” ante el futuro de la compañía y sus trabajadores. Ante esto, aseguran que mantendrán reuniones con todos los actores implicados en la operación para manifestar su posición y exigencias en este proceso, entre ellos previsiblemente el Ejecutivo. Y es que el sindicato pide a todos los actores, directos e indirectos, “sobre todo a la dirección actual de Talgo y al Gobierno” la toma de decisiones correctas desde el punto de vista industrial y de futuro “más beneficiosa” para los intereses de la plantilla de Talgo. “Que las decisiones que tomen sean desde la visión no solo política y económica, sino también industrial y de futuro más beneficiosa para los intereses de las miles de personas que trabajan en Talgo de manera directa e indirecta”, reclaman desde el sindicato tras la reunión celebrada este lunes.
La sección industrial de CCOO ya incluye en el comunicado remitido tras la reunión un supuesto que podría convertirse en realidad: que la opa de Magyar Vagon sobre el negocio de Talgo no salga adelante. En este caso, por el bloqueo del Gobierno a la operación deseada por los húngaros. “Que, en caso de no permitirse la opa, se empiece a trabajar en las necesidades de una empresa estratégica para el país”, reza literalmente el comunicado de Comisiones Obreras al que ha tenido acceso este medio tras la reunión. Por el momento, el Ejecutivo se emplaza a tener en consideración toda la información relativa a la oferta presentada por el grupo húngaro sobre el negocio del fabricante de trenes para emitir una opinión formada y determinante para el futuro de Talgo y sus trabajadores. Un papel que, de momento, no confirman haber recibido.
