El presidente de CaixaBank, José Ignacio Goirigolzarri, ha reiterado este miércoles su defensa al rescate de Bankia, efectuado en 2012, con el objetivo de salvar a los clientes de la entidad. Durante su intervención en el desayuno informativo de Nueva Economía Fórum, el que fuera presidente de Bankia antes de la fusión con CaixaBank ha defendido la decisión tomada en ese momento para ayudar a los depositantes de la entidad.

“Cuando se rescató a Bankia no se rescató a los accionistas que, desafortunadamente, perdieron mucho dinero. No se rescató a los banqueros. Todos los que salieron no recibieron ni un euro de indemnización. No se rescató a la plantilla de Bankia que sufrieron un ERE muy duro y una reducción de las retribuciones. Se rescató a los depositantes” -ha explicado el líder de la extinta Bankia- “Parece que si no se devuelven las ayudas el rescate fue un error. No estoy de acuerdo con eso”.

En esta línea, Goirigolzarri considera que el rescate no sería un error, incluso si no se logran recuperar las ayudas del Estado, ante la pregunta sobre una posible salida del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) del capital de la entidad financiera. Sobre esto, el directivo ha defendido públicamente que el nivel de ayudas que el Estado pueda recuperar "dependerá de las decisiones que se tomen sobre la permanencia como accionista del FROB y de la evolución de la cotización". “La responsabilidad de cualquier accionista es gestionar la rentabilidad y el FROB, como cualquier otro accionista, tiene esa responsabilidad” -ha reiterado el directivo ante la pregunta de los medios de comunicación- “No es mi responsabilidad. Es responsabilidad del Gobierno”.  

El ahora presidente de CaixaBank, tras la fusión con Bankia, ha recordado los detalles del rescate efectuado en 2012. Goirigolzarri ha reconocido que, en caso de haber afrontado la cobertura de hasta 100.000 euros por depositante estipulado por ley, el coste del rescate a Bankia hubiera ascendido hasta los 60.000 millones de euros, una cifra que finalmente se redujo hasta los 20.000 millones de euros.

Sorpresas positivas para la banca española

Experto y buen conocedor de la historia de Bankia y CaixaBank, el empresario ha celebrado el cumplimiento de los objetivos marcados en la fusión formalizada en 2020. “Queremos hacer un tipo de banca distinto: mucho más inclusiva y más cerca de las familias y las empresas”, ha reiterado el ahora presidente de CaixaBank. El directivo ha celebrado también los bajos niveles de morosidad en su entidad, y en resto de la banca española, "algo sorprendente positivamente". 

De cara a la actualidad más acuciante, el directivo ha celebrado la positiva evolución de la economía española, mejor de lo esperado, “incluso para los que el año pasado éramos optimistas”. Una idea que ya encabezó como uno de los grandes líderes de la banca española este martes en el foro por los 45 años de Cinco Días. Ante esto, Goirigolzarri ha querido mandar un mensaje al Gobierno que gane las próximas elecciones generales, sea cuál sea, para trabajar en dos cuestiones “estructurales”: la baja productividad y los altos niveles de déficit y deuda pública, todavía “muy elevadas” desde el punto de vista del directivo por el impacto de la pandemia.

Relacionado La banca española constata la buena marcha de la economía

Para Goirigolzarri, la productividad del mercado laboral nacional continúa en niveles bajos, a pesar de que el número de afiliados ha mejorado con respecto a los niveles prepandemia. Y es que, en el lado más negativo, el presidente de CaixaBank recuerda que el número de horas trabajadas está todavía por debajo de los niveles prepandemia. "El punto débil más importante de la economía española es su baja productividad crónica, a la que solo se puede hacer frente con políticas desde el lado de la oferta", ha reconocido el presidente de la entidad.

Goirigolzarri anticipa dos subidas de tipos más del BCE

El líder de CaixaBank se ha pronunciado también sobre las perspectivas de la inflación, un “factor relevante” para Europa que va a ser la que marque la política monetaria comunitaria del Banco Central Europeo (BCE). Ante esto, Goirigolzarri llama a ser “muy realistas” y prudentes y anticipa, en base al mercado, dos nuevas subidas de tipos por parte del BCE de 25 puntos básicos, la primera prevista para este mismo jueves. La evolución de los tipos de interés han centrado parte de la intervención del presidente de CaixaBank, que recuerda que hace apenas unos años “estaban a cero”.

Gorigiolzarri también ha puesto sobre la mesa que la reputación de los bancos españoles ha mejorado desde 2017 gracias, en parte, al aumento de la legislación. Por eso mismo, ha reiterado su petición a Bruselas de reforzar la regulación bancaria, teniendo en cuenta las diferencias entre los 27 Estados miembros. En esta línea, el baquero pide una “auténtica unificación” del mercado de capitales europeo como la “única manera de tener bancos potentes”.

Precisamente sobre las diferencias entre los Estados miembros, Goirigolzarri considera que la fuga de Ferrovial a Países Bajos “no va a tener muchas repeticiones" en el resto del sector empresarial, como ya dejaron patente los gigantes del Ibex tras el anuncio de la marcha. Es más, ha matizado que tendrá que ver más con cada empresa en concreto que con el ámbito político. "No creo que con un cambio de Gobierno la gente cambie decisiones tan importantes", ha reiterado el directivo, despejando cualquier amenaza de fuga como efecto espejo de Ferrovial. Tampoco ha querido pronunciarse sobre el futuro del impuesto extraordinario a la banca, dejando la decisión "en manos de los ciudadanos".