Cox Energy ha presentado una oferta por valor de 564 millones de euros para hacerse con todas las áreas de negocio y el corporativo de Abengoa tras declararse la empresa andaluza en preconcurso de acreedores. A través de un comunicado oficial, la compañía ha explicado su propuesta para hacerse con el negocio de Abengoa, en la que promete asumir los 206 millones de euros de deuda y avales vivos de proyectos de Abengoa, así como otros 252 millones de euros de deuda Project Finance que la compañía sevillana tiene ya asociada a otros activos. Asimismo, Cox Energy se hará cargo de 22,8 millones de euros de pagos pendientes a la Seguridad Social, también del pago de las nóminas atrasadas de los trabajadores, y ha garantizado el abono del 100% de los créditos privilegiados a los acreedores de la compañía.
Cox Energy, liderado por Enrique Riquelme, es un grupo industrial con presencia en España y Latinoamérica y, desde hace meses, ha dejado patente su interés por hacerse con Abengoa en una competición con otras cuatro empresas. Ahora, la compañía ha ratificado que realizará un pago mínimo al concurso por Abengoa de 27,3 millones de euros, a través de un mecanismo que podría incluso aumentar el valor en el futuro. Entre otras condiciones, la compañía ha garantizado el abono de la totalidad de los créditos privilegiados según la valoración de la administración concursal a los acreedores de la deuda de Abengoa. Así, Cox Energy ha confirmado que asumirá la deuda y los avales vivos de Abengoa.
El plan financiero presentado por Cox Energy para hacerse con el 100% de Abengoa recoge una línea de avales valorados en 300 millones de euros. Por otro lado, la carga de trabajo que aportará la compañía reducirá en dos terceras partes la necesidad de tesorería que tiene a día de hoy el negocio de Abengoa, según los detalles de la propuesta presentada.
Cox Energy prevé destinar 2,5 millones al pago de nóminas atrasadas
Más allá de los términos financieros de la operación, la compra de Abengoa por parte de Cox Energy supondría el pago de las nóminas atrasadas de los trabajadores de la compañía, tal y como consta en la propuesta de mejora que ya presentó el grupo industrial liderado por Riquelme el pasado viernes ante la administración concursal. Para ello, ha comprometido hasta 50 millones de euros destinados a reducir la necesidad de caja de Abengoa, de los que 2,5 millones de euros se han destinado ya a abonar las nóminas atrasadas de los trabajadores de la ingeniera andaluza.
Además del pago de las nóminas atrasadas, la compañía ha comprometido también 7,5 millones de euros adicionales que, en caso de que Cox Energy resulte finalmente el adjudicatario de Abengoa en el concurso, se abonarán en un proceso que va desde que se anuncie la decisión hasta la toma de control de la compañía.
"Abengoa es una compañía estratégica para España y queremos que vuelva a ser referente. Estamos convencidos de que nuestra propuesta permitirá conformar un grupo líder de desarrollo de soluciones energéticas", ha reiterado el presidente de Cox Energy, Enrique Riquelme, tras hacer pública su propuesta para hacerse con el total de la ingeniera sevillana.
Además de anunciar su decisión de comprar el 100% de Abengoa, Cox Energy ya ha comenzado a dejar patente su apuesta por la compañía con la adjudicación directa a Abengoa de un contrato para la construcción de la planta fotovoltaica Sol del Vallenar en Chile, por un valor de 200 millones de euros. Un proyecto que se desarrollará durante 18 meses y tiene previsto emplear a más de 1.000 personas en la construcción en el país lationamericano.
Plan industrial "sólido" para asegurar la viabilidad y el empleo en Abengoa
"Este es el primero de los contratos que se irán materializando en las próximas semanas tanto en Chile como en España y que se incrementarán con una nueva cartera de proyectos de gran visibilidad para el período 2026-2030, que se ejecutarán bajo el mismo esquema de rentabilidad garantizada", ha aclarado Riquelme tras adjudicarse el proyecto chileno.
La compañía ratifica que su oferta por Abengoa es la única que contiene un plan industrial "sólido" que pueda garantizar la viabilidad de la compañía "a corto, medio y largo plazo". A nivel laboral, la entrada de Cox Energy permitirá mantener los más de 9.500 puestos de trabajo de la empresa andaluza, actualmente en peligro por los problemas financieros que ha sufrido en los últimos años, llegando a declararse en concurso de acreedores. No obstante, Cox Energy no es la única empresa presente en la lucha por Abengoa, sino que compite con otras cuatro compañías interesadas en quedarse con el negocio de la andaluza. Se trata de Urbas, Ultramar, RCP y Terramar.
