El sector financiero no ha tardado en responder a las palabras de la vicepresidenta primera y máxima responsable económica del Gobierno, Nadia Calviño, sobre el acuerdo con la banca para proteger las hipotecas de los más vulnerables que quiere cerrar "cuanto antes". La ministra de Asuntos Económicos reveló públicamente en la rueda de prensa tras el Consejo de Ministros de este martes que las negociaciones terminarán a finales de esta semana, -sin desvelar una fecha concreta-, algo que celebran desde la Confederación Española de Cajas de Ahorro (CECA), una de las patronales presentes en las conversaciones. “Si Nadia Calviño quiere que acaben esta semana, acabarán esta semana”, ratifican fuentes de CECA a ElPlural.com.

CECA engloba, a día de hoy, a bancos y cajas de ahorro y es una de las grandes asociaciones negociadoras junto con la Asociación Española de Banca (AEB). Ambas confían en alcanzar un acuerdo para proteger las hipotecas de los clientes bancarios y reciben las palabras de Calviño como una señal de que las negociaciones “van por buen camino”, en fuentes de Banco Santander, que defienden que el acuerdo “es factible por la voluntad de entendimiento”. En el otro lado de la negociación se encuentra el Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital, en constantes conversaciones con la banca, tal y como reconocen también desde el sector.

Las negociaciones entre ambas partes tienen un doble objetivo. Por un lado, frenar el impacto de la guerra de Ucrania materializado en el encarecimiento de los precios energéticos y de la cesta de la compra y, por otro, de las subidas de los tipos de interés desde los bancos centrales. Así, Gobierno y banca mantienen las conversaciones para cerrar las alternativas de apoyo financiero, acuerdo que podría llegar incluso en las próximas horas. 

“Los bancos somos los primeros interesados en que los clientes puedan pagar. Nuestra prioridad son los clientes”. Esta es, quizás, la frase más repetida durante las negociaciones entre banca y Gobierno de las últimas semanas, pronunciada tanto por las grandes patronales -AEB y CECA- como por los líderes de las principales entidades financieras en sus correspondientes presentaciones de resultados. Uno de ellos ha sido el consejero delegado de CaixaBank, Gonzalo Gortázar, que avanzó que, en caso de no alcanzar un acuerdo con Asuntos Económicos, la entidad continuaría con sus propias medidas.

CaixaBank, protagonista de la negociación por su propuesta de topar las hipotecas variables

Precisamente CaixaBank ha sido una de las grandes protagonistas de la negociación al presentar una propuesta que pasaba por topar las hipotecas variables para frenar la subida del Euríbor. Una propuesta que reconoce no ser urgente a día de hoy en base a las ratios de morosidad bancaria, alrededor del 3-4% de media en el sector nacional, -muy lejos de los niveles de la crisis de 2008 según las cifras del Banco de España- pero también por el limitado porcentaje de hipotecas de tipo variable en las entidades financieras españolas.

En el caso de la entidad catalana, el consejero delegado desmintió sufrir un problema de impago de hipotecas. Asimismo, avanzó en la presentación de resultados económicos que las hipotecas a tipo variable suponen un porcentaje cada vez menor en la cartera de CaixaBank. Prueba de ello son las cifras presentadas en sus cuentas económicas, donde más de un 90% de estos productos se ha formalizado a tipo fijo hasta septiembre.

Gortázar hacía un llamamiento a la calma sobre el impago de hipotecas en la presentación de resultados hasta septiembre hace apenas dos semanas, desmintiendo “el riesgo de la crisis de 2008”. “Tenemos una cuestión importante a la que hacer frente y a la que vamos a buscar soluciones constructivas, pero esta situación no tiene, afortunadamente, el riesgo de la crisis anterior”, explicaba el CEO. Por el momento, desde CaixaBank se emplazan a conocer el acuerdo final, que podría llegar este viernes, con Calviño antes de tomar nuevas decisiones.

También el consejero delegado de Banco Santander, José Antonio Álvarez, reconocía no observar problemas a la hora de pagar las hipotecas. “La cartera más sensible y más antigua está a carácter fijo” -tranquilizaba el CEO en la presentación de resultados- “No estamos ni de lejos en la situación de 2008 o 2009. Estamos en una situación de adecuación y acomodación de pagos".

¿Qué falta para cerrar el acuerdo?

Desde CECA matizan que las propuestas presentadas en la negociación corresponden a las propias patronales y no tanto a las entidades individuales, como parece que ocurrió con CaixaBank hace un mes. Las patronales aseguran así que las negociaciones “siguen abiertas” y confían en el acuerdo anunciado por Calviño. “Veo complicado no llegar a un acuerdo”, afirman fuentes de CECA a ElPlural.com. En todo caso, si finalmente se incluye la propuesta de topar las cuotas hipotecarias, fuentes de la negociación guardan silencio y no se conoce aún si se revertiría parte o toda la subida de cuotas tras el alza del Euríbor, para qué deudor o a partir de qué situaciones podría solicitarse. Es decir, los requisitos que debe cumplir el cliente para ser considerado vulnerable o en situación de dificultad a la hora de pagar la hipoteca. 

A, previsiblemente, unos horas de conocer el acuerdo final entre el sector financiero y el Gobierno, los flecos de la negociación apenas han cambiado desde hace un mes. Fuentes presentes en las conversaciones revelan dos puntos clave que estarían marcando estas últimas horas de la negociación. Por un lado, mejorar el Código de Buenas Prácticas del sector financiero, algo que las entidades han reclamado desde hace años. Por otro lado, ampliar la protección más allá de los consumidores vulnerables hacia las clases medias. Y es que este ha sido uno de los escollos principales de la negociación por la necesidad de ampliar el concepto de familias vulnerables. Fuentes de CECA aseguran que la definición de familias vulnerables data de 2012, hace una década, por lo que es necesaria una revisión antes de cerrar el acuerdo con Calviño.

De cumplirse los plazos anunciados por Nadia Calviño, literalmente "a finales de esta semana", el acuerdo entre banca y Gobierno podría materializarte este mismo viernes. No obstante, las partes de la negociación reconocen no tener un plazo marcado y deslizan que podría darse incluso el domingo. De ser así, las negociaciones continuarían durante el fin de semana para cumplir con las palabras de la ministra.