Con el objetivo de frenar la desbocada inflación, se prevé que el Banco Central Europeo (BCE) suba, como mínimo, medio punto porcentual los tipos de interés. El pasado agosto la inflación de la eurozona llegó al 9,1%, otro máximo histórico, por ello, el BCE ha marcado como objetivo que esta sea se establezca en torno al 2%.

El tipo de interés del BCE es el interés del dinero que este presta a los bancos, por lo que una subida de estos repercute en el capital que las entidades bancarias ofrecen a sus clientes. Por tanto, influye en la capacidad de empresas y particulares para el endeudamiento y de ahorro.

En lo que va del año, 80% de la tasa de inflación registrada afecta a los sectores de la energía, la alimentación y los bienes industriales, según datos del Banco Central Europeo. Respecto al sector servicios, en mayo alcanzó el 3,5%. Siendo este el incremento más alto desde mediados de los años 90 tras la reactivación de la demanda al acabar el confinamiento.

En este sentido, el BCE considera que un incremento en los tipos de interés frene la capacidad de endeudamiento y de consumo de empresas y de particulares, permitiendo un equilibrio de la inflación en estos sectores.

¿Cómo afecta a las empresas?

Para aquellas empresas pretendan abrir una línea de crédito, se verán obligadas a hacer frente a intereses más elevados y se les reducirá su capacidad de realizar inversiones y contrataciones, con el fin de contribuir a la frenada del alza de los precios.

¿Cómo afecta a los particulares?

Respecto a los particulares, estos verán que las hipotecas serán de las primeras afectadas por la subida de los tipos de interés del BCE. Por un lado, las hipotecas a tipo variable referenciadas por el euríbor deberán ser revisadas para recalcular sus cuotas. Por otro lado, la cuota de las actuales hipotecas de tipo variable subirá y, en general, las nuevas hipotecas serán más caras.

De igual manera, los particulares que quieran solicitar un crédito al consumo presenciarán la misma evolución que con la situación de las hipotecas, un alza de las tasas en los tipos de interés variables. Al igual que con las empresas, estas medidas supondrán una reducción de la capacidad de consumo de las familias para frenar el aumento de los precios.

Sin embargo, los usuarios dedicados al ahorro cobrarán potencial con esta subida de los intereses, ya que los bancos les ofrecerán mejores remuneraciones a cambio de aportarles liquidez. Los depósitos y las cuentas remuneradas ofrecerán mejores tipos de interés, aunque esta no llegará a compensar la pérdida de valor adquisitivo debido a la inflación.