Miles de manifestantes han salido este sábado a las calles de las principales ciudades francesas para protestar contra la ultraderecha y en particular contra la candidata presidencial Marine Le Pen, que se disputa la presidencia con Emmanuel Macron el próximo 24 de abril.

Según datos de la policía, en París han sido unos 9.200 los asistentes a la manifestación, que se ha desarrollado bajo el lema 'No a la extrema derecha', iuna cifra muy por encima de la que preveía la Prefectura, que estimaba entre 3.000 y 4.000.

Pero no solo en la capital ha habido movilizaciones. Estas se han repetido en una treintena de ciudades, convocadas por organizaciones como la Liga de Derechos Humanos, SOS Racismo, el sindicato Confederación General de Trabajadores (CGT) o el Sindicato de la Magistratura entre otras.

Los principales candidatos conservadores, socialistas y ecologistas han pedido ya el voto para Macron, mientras que el tercer candidato más votado, Jean-Luc Mélenchon, de La Francia Insumisa, no lo ha hecho abiertamente, pero ha emplazado a los electores a "no dar ni un solo voto" a Le Pen.

Le Pen las tilda de antidemocráticas

Por su parte, la líder de la ultraderecha francesa, Marine Le Pen, ha criticado las manifestaciones contra ella, que considera una expresión "profundamente antidemocrática" frente a su paso a la segunda vuelta de los comicios la semana que viene.

"Me parece que las manifestaciones contra los resultados de unas elecciones son profundamente antidemocráticas. Las elecciones no se impugnan en las calles", ha lamentado  en declaraciones a la prensa durante una visita Saint-Rémy-sur-Avre.

“Creo que (los manifestantes) no serán muy numerosos. He conocido en el pasado cosas un poco más espectaculares", ha declarado en relación a las cifras de participación, antes de determinar que "si el sistema está efectuando esta demonización" de su figura "es porque tiene miedo".