Fue al término de la rueda de prensa de presentación de resultados del grupo Inditex (récord de ventas y récord de beneficios), cuando el presidente y consejero delegado, Pablo Isla, aprovechó para responder al programa 'Salvados', de la La Sexta, que hace dos semanas denunciaba los métodos de fabricación de los gigantes textiles y en el que no quisieron participar firmas españolas como el Corte Inglés y la propia Inditex.

Puertas abiertas
Isla declaró que "las puertas están abiertas, tanto aquí como en la cadena de producción", y añadió: "les invito a todos a que vean el trabajo con las distintas entidades con las que contribuimos a mejorar las condiciones laborales". Además, el jefe de Inditex incidió en las auditorias que se realizan en los centros de producción, pero explicó que "podemos hacer más de 8.000 o 10.000 auditorías, pero para nosotros lo importante es el trabajo conjunto". Tras resaltar que trabajan con todos los sindicatos de la industria y "mano a mano con los sindicatos locales" incidió en que "tenemos más fe" en el trabajo conjunto con la OIT, la Ethical Trading Initiative y proveedores locales "para mejorar las condiciones salariales y laborales".

Lo que deja en España
El CEO de Inditex quiso dejar bien claro los beneficios que tiene el 'efecto sede', o lo que es lo mismo que el mayor gigante textil del mundo tenga su sede en España. Entre otros datos expuso que sólo en nuestro país tiene más de 700 proveedores textiles que facturar más de mil millones al año y 7.000 proveedores en total (telecomunicaciones, mobiliario, etc.), a los que Inditex ha pagado más de 4.100 millones de euros el año pasado y "generan, en empleo indirecto, más de 50.000 personas y sumado al directo más de 100.000 trabajadores".

Mil millones en impuestos
Además el 'efecto sede' tiene repercusiones en la hacienda pública española: "la tributación directa ha sido de más de mil millones de euros", de los que más de 500 millones son del impuesto de sociedades. Para dejar más claro el tema de los impuestos que pagan en España, Isla hizo público el tipo de gravamen: "pagamos un tipo del 26%". Todo ello sirvió para que añadiera que "España tiene mucho más peso en tributación (dentro del grupo) que en puro volumen de negocio. Nos sentimos muy orgullosos".

Siguiendo la doctrina de los ejecutivos del Ibex 35, se negó a valorar la situación política española: "entiendo la inquietud y la pregunta, pero me limito a hablar de la compañía".