Al grito de “soy sanchista hasta la médula” abrió la concejala de Cultura del Ayuntamiento, Ana Redondo, el mitin de Pedro Sánchez este domingo en Valladolid, en un abarrotado pabellón de la Feria vestido de rojo en apoyo al candidato a la Alcaldía, Óscar Puente, acompañado del secretario general del PSOE en Castilla y León, Luis Tudanca, y con la mirada puesta en el presidente, que llamó a “llenar las urnas de futuro” frente al “insulto, la descalificación, la campaña del odio y la derogación”.

“Derogar es volver al pasado, y el futuro siempre da la razón al progreso”, deslizó, a colación de la sentencia del Constitucional sobre el derecho al aborto, 13 años después del recurso del PP. “Sólo les falta decir que quieren derogar el derecho a tener derechos”, ironizó, “y está bien que lo digan; le agradezco a Ayuso que diga en público lo que Feijóo dice en privado, en reuniones secretas con fiscales; pero demuestran no conocer a la ciudadanía española, que si tiene que elegir entre avanzar o retroceder, elige avanzar”.

En tono socarrón, el presidente aseguró que entiende la ‘frustración’ del Partido Popular. “Llevan desde que llegué al Gobierno anunciando el apocalipsis, que España se rompía, que se hundía, que estábamos fuera del circuito internacional, el otoño caliente… no dan una a derechas, por eso están en el insulto, la descalificación, la campaña del odio y la derogación, pero yo os pido una campaña con respeto, con respuestas y en positivo”.

“Las resistencias de la derecha son fuertes, pero las hemos ido venciendo, y eso les frustra, porque el futuro siempre da la razón”, reiteró.

Fondos para salud mental en las comunidades

Con un discurso muy enfocado en la sanidad, a lo recuperado por el Gobierno actual tras los recortes de Mariano Rajoy, -7.000 millones en Sanidad y 3.000 en educación pública, recordó-, Sánchez se refirió específicamente a la salud mental, materia para la que anunció una transferencia a las Comunidades Autónomas de 38,5 millones de euros que se aprobará el próximo martes en el Consejo de Ministros.

Sánchez incidió en los 90.000 sanitarios más desde la época de Rajoy, las 7.000 camas UCI frente a las 4.000 que había en España al inicio de la pandemia, y subrayó que “el peor enemigo del sistema público de Salud no son los virus ni las enfermedades, sino los recortes”.

Con respecto a los de Rajoy, afirmó que “nunca fue la crisis financiera, sino el tratar de imponer el dogma neoliberal, basado en mentiras”, entre las que citó el ‘mantra’ de que el dinero está mejor en el bolsillo de los ciudadanos. El presidente se preguntó quién puede pagarse un seguro privado, quién puede afrontar una operación de cadera, un tratamiento de cáncer, un trasplante de corazón. “Si eso le pasara a un ser querido, yo estaría dispuesto a arruinarme, pero no quiero eso para mi país”.

“Dicen que no les gusta que sea el ‘hombre anuncio’, pero nosotros no anunciamos, publicamos en el BOE”, continuó, “protegemos a la gente, hacemos avanzar al país”, porque, en su opinión, “el drama del país es que tenemos una oposición que no tiene nada que ofrecer”, y que, señaló, espera que durante la campaña no se haga nada, pero “los problemas de la ciudadanía no pueden esperar”.

Elegir recortes o revalorización

De ahí que el presidente insistiera en que “votar importa, porque con el voto podemos elegir recortar o revalorizar pensiones, abrir consultorios en el medio rural o privatizar, reformas laborales o recortes a los trabajadores”.

Sánchez se detuvo en reclamar, de forma especial, el voto de las mujeres, a las que citó como principales perceptoras del Salario Mínimo Interprofesional, de las pensiones, de los fondos para economía de los cuidados o de los contratos fijos que ha permitido la reforma laboral del Gobierno.

“Todo esto siempre tiene un comienzo, el voto para el PSOE”, finalizó, “no es felipismo, ni zapaterismo, ni sanchismo: se llama socialismo, y vamos a llenar las urnas de futuro.

Mensaje de Puente a los votantes del PP

El alcalde de Valladolid y candidato a la reelección, Oscar Puente, por su parte, tuvo un recuerdo para los ocho años de oposición en el Ayuntamiento, antes de llegar al gobierno municipal en 2015; para el trabajo intenso que, en la primera convocatoria electoral, la de 2011, “sudamos la camiseta, y no fue bien, pero no nos rendimos”, dijo, y agradeció que cuatro años después, la ciudadanía le diera la oportunidad a su candidatura.

En sentido contrario, achacó a la oposición municipal del PP, durante estos ocho años de gobierno del PSOE, que su trabajo ha sido “nada”.

“No han pisado un barrio; el otro lado de las vías no lo conocen, no conocen la ciudad, y van con un candidato ‘paracaidista’, de última hora, que se empadronó en Valladolid para no tener que votar en Simancas”.

Por este motivo, envió un mensaje a quienes se identifican con el Partido Popular: “Pedidles respeto, porque os merecéis algo mucho mejor que eso: no tienen programa, no tienen candidato, no han trabajado. No dejéis que os tomen el pelo”.

Puente presumió del ‘valor actual del Ayuntamiento’, que en ocho años ha pasado de los 400 millones de euros, según las cuentas del interventor, a 1.200, frente a los 200 millones que se jactaba de haber sumado en sus veinte años de gobierno el exalcalde, Javier León de la Riva.

“Hemos cuidado de nuestra empresa, de lo público, y hoy el Ayuntamiento vale más porque gestionamos el agua nosotros, como el aparcamiento de la Plaza Mayor”, dijo, “porque de esta empresa, que es de todos, depende la gente que más necesita del Ayuntamiento, y nosotros defendemos a la gente que no puede pagar lo que otros sí pueden pagar”.