Los resultados electorales del pasado 13 de febrero en Castilla y León no le brindaron los apoyos suficientes a Alfonso Fernández Mañueco para lograr el objetivo que tenía cuando anunció estos comicios anticipados, que era una mayoría suficiente para formar un gobierno en solitario. Así, el líder popular tiene que dialogar y llegar a acuerdos con las diferentes fuerzas que han obtenido representación parlamentaria, aunque la decisión podría estar tomada antes de haber conversado con todos ellos.

Así lo creen algunas fuerzas de las Cortes de Castilla y León, que dan por sentado que el socio prioritario para el Partido Popular es Vox, que consiguió pasar de un procurador en 2019 a 13 en las elecciones de este 2022. El primero en ser convocado por el popular en la ronda de consultas fue Luis Tudanca, líder del PSOE, que salió “absolutamente estupefacto” y “tremendamente desconcertado” tras 15 minutos de conversación.

Tal como informó el líder socialista, al mentar la palabra “corrupción” sin ningún tipo de acusación, Mañueco se levantó y abandonó la reunión. Palabras que luego confirmó el propio Mañueco: “Dije que si se pronunciaba la palabra corrupción me levantaba y me iba”. “El PP, como nos temíamos, ni en temas de regeneración ni de aislar a la extrema derecha está dispuesto a nada. Solo quiere hablar de cómo seguir en el poder a cualquier precio y de cualquier manera. Y para eso que no cuente con el PSOE”, remarcó Tudanca.

Por ello, el líder socialista se muestra convencido de que el Partido Popular tiene decidido “desde el primer día” que va a gobernar con Vox. Pero con esta postura coinciden otros rostros del arco parlamentario autonómico, y así lo han mostrado en declaraciones a ElPlural.com.

UPL, Por Ávila y Soria ¡Ya!

Tanto Unión del Pueblo Leonés (UPL) como Soria ¡Ya! obtuvieron tres procuradores el pasado 13 de febrero, y su peso en las Cortes se ha elevado, aunque una alianza entre PP y Vox les dejaría sin ningún tipo de opción. Luis Mariano Santos, procurador de UPL se muestra rotundo y cree que el pacto entre derecha y extrema derecha está hecho desde hace tiempo: “Desde el primer momento siempre he dicho que me parece todo un postureo y casi tengo la certeza de que el pacto entre el PP y la ultraderecha está hecho”.

Es el lunes cuando UPL tiene fijada la reunión con el PP, aunque afirma que tiene unas expectativas muy bajas: “Vamos a ir a la reunión el próximo lunes con pocas expectativas, porque lo que nos trasladan desde el PP es que va a ser una reunión para dialogar y no negociar, por lo que entendemos que es más bien un contacto parlamentario casi casi de cortesía”.

“Me temo que van a continuar con su línea de política y no van a hacer caso de lo que han dicho los ciudadanos. Si este es el caso nos van a tener en frente en lo que va a ser la próxima legislatura”, añade. Por eso, concluye que “todo apunta a este acuerdo entre Mañueco y Vox”, aunque ninguno de los dos se encuentre “en una posición fácil para negociar, con lo cual ambos tendrán que ceder”.

Desde la España Vaciada, Soria ¡Ya!, que es la única plataforma que ha obtenido representación en las Cortes, muestran que sería una gran decepción la formación de un gobierno con la ultraderecha. Ante la cita que tienen con Mañueco, y que les ha asegurado que es para dialogar y no negociar, Carlos Vallejo, portavoz de la plataforma, explica a este medio que van “con la intención de hablar, de mostrar las posiciones de la plataforma y conocer la postura del PP”.

“Nosotros tenemos muy claras nuestras ideas y nuestro siguiente paso es intentar llegar a acuerdos. Si el PP llega a un acuerdo con Vox nosotros no pintaríamos nada porque no somos necesarios. Encima Vox viene repitiendo desde hace tiempo que no cree en la España Vaciada, en la fiscalidad diferenciada, y quiere derogar leyes que se han aprobado por una amplia mayoría…”, reflexiona.

Por último, desde la formación abulense de Por Ávila, que ha repetido los resultados de 2019 con un procurador en las Cortes, afirman que están a “expensas de poder concretar una reunión con el PP” en la que esté presente Mañueco, para evitar así la experiencia que vivieron en diciembre del año pasado, cuando se les acusó de negociar a las espaldas de los populares con Ciudadanos.

Si algo tienen claro es que no quieren “interlocutores no validos” y que no pondrán sobre la mesa sus demandas para la provincia de Ávila, que marcan su “eje estructural político”.

Hora y cuarto de reunión con Vox

El pasado miércoles, dos días después de la reunión de 15 minutos con el PSOE, Mañueco se sentó durante una hora y cuarto con Juan García-Gallardo, candidato de Vox a la Junta. Aunque al finalizar el encuentro el dirigente popular afirmó que seguía apostando por un gobierno “en solitario, fuerte y estable”, las relaciones se han ido calentando hasta el punto de asegurar que “hay voluntad” de que se puedan entender.

Pero las exigencias de la ultraderecha son notables, tanto que de no entrar en el Gobierno no apoyarán ninguna candidatura. Según el candidato de Vox, Mañueco se habría abierto a llegar a un acuerdo programático con su partido, sobre la base del programa del PP pero incorporando algunas de las propuestas de la extrema derecha. No obstante, desde las filas de la formación de Abascal se niegan en rotundo a votar a favor de una investidura si no se les permite entrar en el Ejecutivo.

“El mandato de los ciudadanos es cristalino y lo que estamos esperando es que el PP interiorice la idea de que tienen 31 procuradores y la mayoría absoluta está en 41”, aseguraba Gallardo.