El pasado viernes el Gobierno de Isabel Díaz Ayuso en la Comunidad de Madrid anunció nuevas medidas para tratar de contener el avance del coronavirus. La región ya cuenta con 523.629 contagios y 20.674 muertos en el recuento global del virus. Son 5.938 y 63 notificados en el último día y 34.494 contagiados y 465 fallecidos más que hace tan solo una semana. 

La situación es tan catastrófica que el Ejecutivo autonómico se ha visto obligado a retomar el mando único sanitario en la región, tomando así el control de la sanidad privada.

A pesar de que el equipo de Ayuso ha endurecido las restricciones en esta tercera ola, todavía cuenta con herramientas que permite adoptar el Decreto del estado de alarma y no han considerado o, directamente, ha rechazado aplicar con rotundidad. 

En concreto, hay una serie de medidas que Ayuso ha rechazado, como es el cierre de la hostelería o de los centros comerciales -como sí se ha hecho en otras provincias como Castilla y León (prohibiendo el consumo en interiores), o en Baleares o la Comunidad Valenciana (donde se ha decretado el cierre total). En cambio, en la Comunidad de Madrid se permite que los establecimientos comerciales, hostelería y restauración estén abiertos hasta las 21:00 horas, con un aforo tan solo limitado en el interior al 50% y en terrazas al 75%.

El cierre perimetral de la Comunidad o de las grandes ciudades es otra opción que el Ejecutivo madrileño ha rechazado, siguiendo optando mayoritariamente por el cierre por zonas básicas de salud, un sistema muy cuestionado. 

La Comunidad de Madrid ha prohibido la reuniones en domicilios de no convivientes, pero sigue manteniendo la posibilidad de reunirse en el exterior hasta un total de cuatro personas.

Otro aspecto que ha causado controversia en los últimos días es lo relacionado con el ocio en discotecas y lugares de fiestas. Ayuso permite que estos locales abran en horario de tarde, como los demás establecimientos, para funcionar como restaurantes. Pero han trascendido imágenes que dejan en evidencia el incumplimiento de las medidas de seguridad contra el coronavirus, como es el caso del Teatro Barceló, del que ElPlural.com difundió imágenes en exclusiva mostrando una fiesta donde ni se usaban mascarillas ni se respetaba la distancia de seguridad.

2.084 euros diarios por cama de UCI a la privada

El pasado miércoles el consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, estableció los 40 centros privados que pasarán a disposición de la administración, además de fijar las tarifas que recibirán por cada paciente en función de si ingresa en planta o en una unidad de cuidados intensivos (UCI).

En concreto, la Comunidad de Madrid pagará por cada paciente que sea tratado por coronavirus 734 euros al día para aquellos que ingresen en planta y 2.084 por día para los que lo hagan en la UCI.

Todo ello se produce pese a la construcción del Isabel Zendal​, que solo cuenta con 16 camas UCI, y que en otros hospitales de la región como el Hospital Infanta Sofía se mantienen cerrados 16 puestos de UCI y toda una cuarta torre.