La disonancia en el Gobierno de la Comunidad de Madrid cada vez es mayor. La gestión de las residencias evidenció las discrepancias entre los dos socios de Gobierno. El lunes, después de que Ignacio Aguado tendiera la mano al PSOE para un acuerdo de futuro conjunto, Isabel Díaz Ayuso lo dejó en fuera de juego y declaró que jamás pactaría “con el desastre”. Fuentes del Ejecutivo regional han advertido a ElPlural.com que la presidenta “se ha vuelto más sectaria”.

Un cambio de actitud que estas fuentes vinculan a su jefe de Gabinete, Miguel Ángel Rodríguez. La relación de Ayuso y MAR ya resultó un elemento disruptor en las relaciones entre Partido Popular y Ciudadanos cuando el asesor de la presidenta de la Comunidad de Madrid dedicó varios insultos a Ignacio Aguado y al exconservador y actual miembro del partido liberal, Ángel Garrido.

Su cercanía con Ayuso, por aquel entonces, puso en alerta a Ciudadanos. Miguel Ángel Rodríguez despertó malestar entre las filas naranjas tras estos comentarios y las conocidas acusaciones hacia el actual vicepresidente de la Comunidad y portavoz del Ejecutivo regional, Ignacio Aguado.

Casi un año después, la influencia de Miguel Ángel Rodríguez en Isabel Díaz Ayuso se está dejando notar y así lo denuncian desde el propio Gobierno de la Comunidad de Madrid. ¿El motivo? La crudeza de la jefa del ejecutivo autonómico en cuanto a los posibles pactos con el PSOE para hacer frente a la crisis que el coronavirus va a dejar en la región.

Ignacio Aguado ha abierto la puerta constantemente a sentarse con el PSOE en una mesa de negociación para buscar las soluciones pertinentes. Pero la postura de Ayuso es diametralmente opuesto. “No con el desastre”. Así de contundente se mostró la presidenta de la Comunidad en El Programa de Ana Rosa.

Unas palabras que no han pasado desapercibidas en el fuero interno del Gobierno madrileño. Fuentes del Ejecutivo regional consultadas por ElPlural.com han advertido que “la actitud de Ayuso está cambiando”. Consideran que “se ha vuelto más sectaria y prepotente”, un hecho que vinculan con la “llegada de su jefe de Gabinete”, a la sazón, Miguel Ángel Rodríguez.

Estas mismas fuentes entienden que su negativa al pacto con el PSOE es sinónimo de “arrogancia, sectarismo y prepotencia”. Además, denuncian que “va en dirección contraria a la iniciativa tomada por Almeida en Madrid Capital, Mañueco en Castilla y León o Moreno Bonilla en Andalucía”.