En la última semana la Comunidad de Madrid ha planteado un nuevo despropósito -en boca de los propios profesionales- en materia de salud; y es que el equipo de Isabel Díaz Ayuso planea que las enfermeras se ocupen de las responsabilidades de los centros de salud cuando no haya médicos durante las vacaciones de verano.

La idea, explicada por ElPlural.com, viene detallada en el Procedimiento de actuación ante la ausencia de médico de familia en un centro de salud y no ha sido bien recibida por los trabajadores. Así las cosas, en declaraciones a este medio, la Asociación de Médicos y Titulados Superiores de Madrid (AMYTS) lamenta el “maltrato” hacia el sector que, aseguraban después de conocer la medida, se evidencia una vez más con esta última acción.

“Están consiguiendo una demanda tremendamente sobredimensionada sin poner el remedio necesario, la aportación de una inversión económica de gran cantidad de dinero para poder atraer mejores condiciones”, afean. En un comunicado emitido por UGT, y del que forman también parte Comisiones Obreras (CCOO), CSIT Unión profesional y el propio AMYTS, los sindicatos subrayan que “cada categoría profesional tiene su formación, sus competencias y su propia plantilla de puestos de trabajo”.

“Ninguna está diseñada para que sus efectivos cubran su trabajo y el de otras categorías diferentes, salvo emergencia”, sostienen, mientras añaden que “las más de 200 plazas vacantes de médicos que no se han cubierto recientemente debido a la mala gestión de la Comunidad de Madrid generan un tremendo descubierto de puestos de Médicos de Familia, pero esto no puede considerarse una emergencia”.

“Cada uno de los pasos que da la Gerencia de Atención Primaria supone un deterioro en las condiciones laborales y asistenciales de los centros. El consejero ha asegurado que “las incidencias en verano se deben a las vacaciones de los profesionales” (obvia decir que la situación de falta de médicos no es debida al verano)”, lamentan.

Sin embargo, la lucha que la lideresa regional mantiene con los trabajadores de la salud no es algo nuevo. De hecho, se viene produciendo desde la pandemia. Este diario ha realizado una lista de algunos de los desplantes más sonados en este sentido. 

1. Los agujeros negros de la pandemia

Ya desde la inauguración de la gran infraestructura del programa de los populares, el hospital Isabel Zendal, los sanitarios denunciaban las condiciones a las que se enfrentaban. Tanto es así que el Ejecutivo Regional solo consiguió atraer a 111 voluntarios de la Sanidad madrileña para sumarse a un proyecto que se vaticinaba faraónico. 

Ayuso empezó reconociendo, unos días antes de que el plazo para su construcción se cerrara, que no iba a contratar a ni un solo sanitario más, y que reorganizaría a parte del personal para que trabajara en su proyecto estrella, anunciado a bombo y platillo. 

Eso sin incluir que uno de los grandes contratos de los servicios de seguridad del centro fue a parar a la empresa familiar vinculada a una exconcejala del PP de Alcorcón. Pero es solo uno de tantos, y es que los contratos a dedo han sido un habitual en esta legislatura, 23 si se considera los del hermano de la presidenta y su entorno. La Fiscalía Europea investiga ahora, de hecho, los concedidos a empresas ajenas al ámbito sanitario a partir de una denuncia de Unidas Podemos. A saber, Vin Doré 24 K, que se dedica al vino, y Air Global Media S.L., que habitualmente proporciona contenidos sobre la Fórmula 1 a teléfonos móviles; pero que durante la crisis del coronavirus trajeron material sanitario por una suma nada despreciable.

La pandemia fue, por tanto, y en cierto modo, poco menos que un agujero negro en la gestión del gobierno popular. Otro de los ejemplos que refleja la dudosa gestión reside es un informe de Audita Sanidad, según el cual casi el 70% de las licitaciones adjudicadas en 2020 fueron a empresas relacionadas con “lobbies” sanitarios. En concreto, de las 2.222 licitaciones adjudicadas durante el año sin considerar los “contratos menores”, 1.531 fueron a parar a conglomerados que pretenden influir en las decisiones políticas. 

Estos son solamente algunos casos, pero el desprecio hacia los sanitarios y, con ello, a veces a la ciudadanía madrileña, se ha repetido en los meses sucedáneos, durante la pandemia y con las diferentes olas, y se ha materializado también de forma verbal.

2. El autocuidado

Así, cuando el coronavirus cogió fuerza con la variante ómicron, y aunque ya las consecuencias fatales no eran nada comparadas con las de la primera ola, la lideresa popular apostó, ante el colapso sanitario, por el autocuidado. 

“El gran hospital de Madrid está en el domicilio de los madrileños, sentenciaba en enero. Las palabras se toparon con un nuevo enfado de las redes sociales. “Encima se ríen en nuestra cara”, lamentaba algún usuario.

 

3. "De repente, no hay médicos"

Un poco antes, pero en esa misma ola -lo anterior fue en enero, esto en diciembre- la presidenta regional insinuó una negligencia en el programa de la mañana de Federico Jiménez Losantos cuando echó la culpa a los médicos de las largas esperas a las que a veces se enfrentaban los madrileños. 

“Los ciudadanos no tienen que estar esperando y en algunos no cogen el teléfono, se cuelgan o de repente no hay médicos. Lo vamos a investigar (…) No todos quieren trabajar y arrimar el hombro”, deslizó. Además de molestar sobremanera a los sanitarios, el Juzgado de primera Instancia número 10 de Madrid admitió a trámite la demanda de CCOO contra la presidenta y sus declaraciones. 

 

4. Contratos covid

Después de la sexta ola, con la situación más normalizada, la Comunidad procedió al despido de 6.000 sanitarios con los llamados contratos covid. En las últimas semanas y ante el repunte de casos se han firmado de nuevo algunos de estos contratos, pero varios por días, incluso por horas. 

Así lo cuenta a ElPlural.com A.R., Técnico en Cuidados Auxiliares de Enfermería (TCAE) -ha pedido a este medio preservar el anonimato-, cuyo último contrato es de tres días. “Llevo 14 contratos firmados en dos años y medio”, denuncia; a la vez que nos explica que en su hospital “van a cerrar controles de plantas” en verano; algo que "nunca ha sucedido". El enfado del personal sanitario para con el equipo de Ayuso llega, por tanto, desde todos los ámbitos. 

5. Huelga de facultativos 

La temporalidad de los contratos no es un caso aislado, sino una realidad que los trabajadores de la Atención Primaria llevan años sufriendo y que han denunciado a los micrófonos de ElPlural.com mientras este periódico hacía un seguimiento de la huelga que los facultativos llevaron a cabo contra la temporalidad -acusada, eso sí, antes de la llegada de Ayuso, aunque acrecentada ahora en muchos casos- y en la que el Ejecutivo incluso marcó unos servicios mínimos del 100% y el 50% respectivamente.

De un tiempo a acá, las Organizaciones Sindicales que conforman la Mesa Sectorial trabajan con la Gerencia de Atención Primaria para abordar otras cuestiones. Ellas lo definen como un "acuerdo que mejore las cargas de trabajo y que la Gerencia se resiste a firmar, ya que contendría propuestas que no le gustan, como el incremento de los tiempos de consulta por paciente o la eliminación de otro invento suyo que es la 'agenda no demorable". 

5 (Bis). Las explicaciones de la Comunidad

Además de las acciones y declaraciones polémicas, la presidenta madrileña tiende a echar balones fuera, por utilizar la expresión coloquial, cuando se han dado algunas actuaciones cuestionables. Por ejemplo, mantuvo durante un largo tiempo el 'yo no tengo nada que ver con mi hermano' o defendió que este había recibido una comisión; pero que no era ilegal. 

De igual manera, cuando no ha sido ella han sido sus consejeros. Ante los 'despidos covid' Ruiz Escudero sostuvo que los sanitarios "tendrían esa oportunidad" de "cara al futuro". Ahora con la estrategia para el verano, el partido que a nivel nacional lidera Alberto Núñez Feijóo defiende que esta “viene a recordar la capacidad resolutiva de las enfermeras en la Atención Primaria, que desde hace más de 30 años trabajan en consultas independientes de los profesionales de medicina de familia, demostrando su competencia en la prestación de cuidados, atención de procesos agudos y resolución de distintas consultas”.