La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha vuelto a desacreditar las manifestaciones protagonizadas por los profesionales sanitarios este domingo en las calles de la capital y ha insistido en acusar al jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, de estar planeando un golpe de Estado. "Quiere instaurar en España una República federal laica", ha afirmado este lunes en un desayuno del Club Siglo XXI.

"No fue en defensa de la sanidad"

En el que ha sido el primer acto de la lideresa tras las multitudinarias manifestaciones por la sanidad pública de este domingo, Ayuso ha vuelto a culpar al "activismo de izquierdas" como azuzador de las protestas y que "busca aferrarse al poder a través de la confusión, la agitación y el juego sucio". "No fue en defensa de la sanidad pública sino para buscar el liderazgo de la ultra izquierda por el debacle del PSOE", ha cargado.

A su juicio, si hubiera respondido a una lucha por la sanidad hubiera habido "más de dos millones de madrileños" en las calles, por lo que "fue otra cosa, se mezclaron varios colectivos". Así, ha acusado a Más Madrid de monopolizar las protestas, en las que dice se produjeron proclamas como "Ayuso asesina". "No era solo de médicos. Ayer el porcentaje era muy diferente y eso tiene que hacer pensar qué ocurre en el PSOE, que se la entregó a Más Madrid", ha dicho.

"Se ha utilizado un pretexto sobre las urgencias 24 horas, sobre las que se ha vertido muchas mentiras. Algo distinto es afrontar la situación de los médicos de la Atención Primaria y otra el pretexto de los centros", ha justificado sobre la puesta en marcha de las nuevas urgencias extrahospitalarias, que han derivado en las protestas y en las denuncias por todo el sector por el "caos" que se ha producido desde el primer día de entrada en vigor de este plan.

"No son hospitales. Cuando alguien tiene una urgencia real llama al 112 y va al hospital. Estos centros sirven para cuestiones menores", ha dicho antes de explicar que es "rotundamente falso" que se puedan atender a pacientes con ictus ya que "no son centros para urgencias de gravedad", en contra de los que dice se empeñan en defender desde la oposición. 

Según sus palabras, esto responde a una "campaña en contra y una movilización absoluta de plataformas", entre las que destacan "algunos sindicatos que no quieren llegar a acuerdos". Con todo, ha rebajado el tono con los profesionales sanitarios, a los que ha querido manifestar su "respeto". "Seguiremos trabajando por la sanidad pública, donde no ha habido nunca tanta inversión ni tantos médicos".

"Nosotros siempre estaremos dispuestos a escuchar a los médicos y enfermeros; a intentar mejorar sus condiciones porque sabemos que son indispensables, porque la protección de la salud es un derecho constitucional y que hay que contar con ellos y que su bienestar profesional es esencial para que podamos disponer del mejor sistema sanitario", ha asegurado.

Sánchez "quiere instaurar en España una República federal laica"

Ayuso ha querido desviar el foco de las protestas cargando una vez más contra el presidente del Gobierno, a quien ha acusado de "asaltar las instituciones". "La motivación de Sánchez es el poder a toda costa. Utilizan las instituciones para beneficiarse de manera autoritaria. Tienen un plan de instaurar en España una República federal laica", ha asegurado en la misma línea que la pasada semana, cuando aseguró que preparaba un golpe de Estado para "acabar con la monarquía".

Además, ha denunciado una suerte de boicot por parte de la coalición en contra de su gobierno y ha asegurado que "Madrid es una pieza a batir" a la que "se la persigue, denigra e incendia". "Sánchez ha entrado en una deriva peligrosa. Es una estrategia de la carcoma al servicio de los independentistas. Para él hay españoles de primera y de segunda", ha sostenido antes de afirmar que el socialista "invade" algunas de sus competencias al frente de la región, como la fiscalidad, para "hacer daño" a través de un "chantaje".

"Animo a no dormirse a quien crea que el peor de los modelos no va a llegar. Sánchez firma nuestra rendición, nadie lo votó para tal cosa", ha afirmado antes de denunciar que "peligra la prosperidad y la libertad" de la región en manos de los "comunistas". "Son los comunistas los que intentan destruir lo conseguido", ha advertido para reivindicar su modelo como "alternativa proyecto autoritario que nos amenaza".