Isabel Díaz Ayuso insiste en incluir la palabra "comunismo" en todas las intervenciones que pueda. Este jueves, la presidenta de la Comunidad de Madrid ha sido cuestionada por el papel de la región en la lucha contra la emergencia climática que afecta a nivel mundial, un asunto que ha vuelto a negar y ante el que ha respondido con negativas y ataques. "Desde el origen ha habido cambios, tendremos que poner medidas pero no pueden ir contra la evidencia científica", ha dicho antes de asegurar que esto responde a una "agenda contra el consumo y el empleo" y al "comunismo" de la izquierda.

De esta forma se ha manifestado la lideresa ante la pregunta de la portavoz de Unidas Podemos en la Asamblea, Alejandra Jacinto, este jueves en un nuevo pleno. Allí, la política morada ha cuestionado a Ayuso "cómo valora la gestión de su Gobierno para combatir la emergencia climática", ante lo que le ha pedido que "no lo gestione como la sanidad". "Ni el caos sanitario se soluciona con tablets ni zoom ni la emergencia con cualquier tontería que se le ocurra", le ha espetado en referencia al "caos" sanitario por la puesta en marcha de las nuevas urgencias extrahospitalarias.

Jacinto le ha recordado durante su intervención algunas de las soluciones que Ayuso o miembros de su Administración "a golpe de ventilador" han planteado en alguna ocasión al respecto de este problema mundial. "No sé si es torpeza, mala fe o incompetencia, pero no está en condiciones para dirigir esta región", le ha lanzado antes de instarla a que "antes de decir las cosas" se las piense. "Cuente diez, que se esfuerce, que para eso cobra más que el presidente del Gobierno", le ha recordado como ya hizo en la pasada sesion del pleno.

Tras esto, y a cuenta de la COP 27 Egipto, la conferencia sobre el cambio climático que se está celebrando en el país, la portavoz ha asegurado que su gestión del clima "es la nada e incluso negligente" y ha puesto de ejemplo a los vecinos del Ensanche de Vallecas y la contaminación por Valdemingómez. También las muertes por las olas de calor que se han producido este verano. Todo mientras Ayuso, ha dicho, "ridiculizaba los refugios climáticos y los madrileños respirábamos aire contaminado".

"Las mujeres y personas vulnerables son las que peor lo pasan", ha dicho al final de su intervención y antes de llamar a todos los madrileños a participar en las huelgas que se han convocado para este fin de semana "por la emergencia climática y por la sanidad".

Ayuso niega la "emergencia climática"

Ante esto, Ayuso ha puesto en cuestión la existencia de una emergencia climática así como el papel determinante de la comunidad que dirige. "Me gustaría preguntar cuánto aporta Madrid a esa emergencia a proporción de lo que se contamina. Una potencia como China contamina 50 veces más que España", ha afirmado antes de decir que "Madrid, dentro de sus competencias, puede hacer mucho para favorecer la calidad del año y dejar un patrimonio natural mejor a las nuevas generaciones", algo que ha defendido ya está haciendo su Administración.

Siempre tienen en su cabeza el comunismo

Con todo, ha insistido en uno de los argumentos esgrimidos en los últimos meses al respecto de este problema, del que se ha desvinculado: "Entre todos se puede hacer mucho pero de Madrid no dependen las olas de calor o el cambio climático, que ustedes confunden con la emergencia".

A su juicio, los intentos de la izquierda de culpar a su Administración de estos asuntos responde a "una agenda que se propaga por muchos lugares" y que, según sus palabras, "se ha convertido en una gran estafa". "Responde a lobbies, empresas y empresas emergentes a los que ustedes le hacen el caldo para que ganen a costa de los demás", ha afirmado. "Hay una ola internacional que impone usos y costumbres que provoca pobreza. Una agenda contra el consumo y el empleo, por eso mezclan los escaparates con el uso de los coches", ha insistido.

Así, Ayuso ha mantenido que "desde el origen ha habido siempre cambios" y ha defendido la "evidencia científica" antes de volver a atacar a la oposición. "Tendremos que poner medidas, pero no pueden ir contra la evidencia científica. Y es que porque siempre tienen en su cabeza lo mismo: el comunismo", ha finalizado su intervención.