Miles de ciudadanos, políticos, sindicalistas y sanitarios han recorrido el trayecto programado en Madrid entre la glorieta de Neptuno y las inmediaciones de Metro Sevilla con pancartas, proclamas y lemas en una multitudinaria marcha para defender la sanidad pública, esa que agoniza y pide inversión y recursos, en lugar de privatizaciones y externalizaciones. Alejandra Jacinto, diputada y coportavoz de Podemos en la Asamblea de Madrid, en declaraciones recogidas por ElPlural.com, ha sido especialmente contundente defendiendo los servicios públicos de la comunidad ante las políticas del Partido Popular y de Ayuso, que han supuesto un detrimento en la calidad de la atención a los ciudadanos.

“Lo que estamos haciendo es defender la sanidad pública a pesar de los planes de la señora Ayuso. Hay que recordar que los servicios de urgencias de la Atención Primaria llevan casi mil días cerrados y desde la fecha lo que ha habido son reivindicaciones sociales y vecinales exigiendo que se deje de desmantelar la sanidad pública de nuestra región”, ha comenzado diciendo.

Después, Jacinto ha recordado el plan que la presidenta de la Comunidad de Madrid ha puesto sobre la mesa y que radica en la incorporación de voluntarios para las urgencias de Atención Primaria: “Frente a eso nos hemos encontrado con un plan encima de la mesa de la señora Ayuso que yo creo que es una tomadura de pelo para los madrileños y las madrileñas, entre otras cosas porque pasa por anunciar centros de Atención Primaria sin médicos. A mí que me lo expliquen”.

“Desde luego creo que eso no es atender las necesidades de los ciudadanos y es dar la espalda a los madrileños, tomarnos por idiotas. Lo que necesitamos es que Ayuso saque sus garras de ese plan de negocio que representa para ella la sanidad y que nos deje vivir tranquilos”, ha añadido, remarcando que “la sociedad madrileña está cansada y hastiada de que se estén desmantelando los servicios públicos”. “Estamos hablando de un servicio público esencial y de derechos fundamentales, y cuando hablamos de eso los madrileños responden, por eso Ayuso debería tomar nota”, ha insistido.

Frente a ello, la coportavoz de Podemos remarca que la solución está en salir a votar en las elecciones autonómicas del próximo 28 de mayo y despojar a los populares del poder: “Lo que hay que hacer es revertir la situación de fondo, y revertir la situación pasa por que el Partido Popular se vaya de las instituciones, tanto del Ayuntamiento como de la Comunidad de Madrid”.

Una concentración con múltiples reclamaciones

Los motivos que han llevado a los convocantes a fijar esta concentración son diversos y numerosos. Tal como han explicado, “dicha movilización surge tras las continuas políticas de recortes y promesas incumplidas llevadas a cabo durante estos años por el Gobierno regional, el cuál ha antepuesto el interés económico, favoreciendo claramente el sector privado, a conservar y fortalecer el sistema sanitario público”. Por ello, piden acabar con “las privatizaciones y externalizaciones encubiertas” y mantener el funcionamiento del actual modelo de Servicios de Urgencia de Atención Primaria (SUAP), Servicios de Atención Rural (SAR) y las Unidades de Atención Domiciliaria (UAD), entre otros.

Asimismo, los organizadores de la marcha denuncian que “las ausencias de medios están afectando negativamente a la correcta atención y salud de los pacientes”, además de una notable sobrecarga de trabajo en el personal sanitario. Todo ello ha generado una ola de indignación ciudadana y movilizaciones constantes en los últimos meses. Por eso, como solución proponen que la Consejería de Sanidad realice un estudio del sistema de salud público, en el que se informe de los tiempos de espera y se determine una financiación adecuada, apostando claramente por la Atención Primaria y acabando con las privatizaciones y externalizaciones de los servicios.

También piden que se elabore una nueva Ley de Ordenación Sanitaria y que se incremente la coordinación entre las Consejerías competentes para mejorar la atención sociosanitaria en las residencias de ancianos, los núcleos más duramente afectados durante la pandemia del coronavirus.