Está a punto de cumplirse el viernes negro 250, la protesta de los trabajadores de la radio y televisión públicas gallegas que iniciaron en tiempos de Núñez Feijóo y que continúan durante la presidencia de su sucesor, Alfonso Rueda, al frente de la presidencia de la Xunta para denunciar la manipulación en los servicios informativos a favor del PP y de los dirigentes del Gobierno regional, en detrimento del central.

En noviembre pasado, funcionarios de la Televisión autonómica salieron a las calles de Santiago por este motivo. Ahora, la plantilla de la Corporación de Radio Televisión de Galicia (CRTVG) acaba de anunciar que en asamblea celebrada en las últimas horas ha decidido iniciar una movilización "sostenida y contundente" en los medios públicos que arrancará el 6 de marzo con una huelga de 24 horas.

Una vez más, los fines que se marcan por parte de los convocantes del comité intercentros son “reclamar el cese de los abusos y restablecer un clima laboral respetuoso con los derechos" de los trabajadores del ente público, así como "erradicar el trato degradante" que "personas con superioridad jerárquica y funcional infligen" a los trabajadores a su cargo.

Asimismo, piden “sin demora” la realización del “estudio psicosocial” acordado en el comité de seguridad y salud laboral, además de la reposición en sus medios de origen a aquellos trabajadores "trasladados como castigo" de la radio para internet o televisión y de la televisión para la radio.

Según explica en un comunicado, el intercentros enmarca estas movilizaciones en un contexto laboral "absolutamente deteriorado" por "años de manipulación informativa, precariedad, marginación profesional y desmantelamiento de la estructura de la capacidad productiva propia" de la corporación.

carta comité intercentros

Del mismo modo, arremeten contra el actual director de la CRTVG, Alfonso Sánchez Izquierdo, a quien han acusado en más de una ocasión de estar detrás de la situación que padecen los medios públicos gallegos. Cabe recordar que Sánchez Izquierdo permanece al frente de la radio y televisión gallegas desde que fue nombrado por Alberto Núñez Feijóo cuando accedió por vez primera a la presidencia de la Xunta en 2009.

Como sucede con el caso de la sanidad pública, la compañía y el Partido Popular echan balones fuera y sin asumir responsabilidades y obviando los años de protestas, denuncias y sentencias condenatorias por parte de los tribunales en materia laboral, achacan las huelgas anunciadas a las “disputas internas de la parte social ante el escenario de elecciones sindicales" y ante la "pérdida de representatividad derivada del proceso de OPE".

Más curiosa ha sido la respuesta del presidente gallego. Alfonso Rueda, ha evitado ofrecer su opinión sobre la protesta puesto que, según sus palabras, se trata de un "derecho constitucional".

No obstante, a continuación, ha rebatido las reivindicaciones de los trabajadores hablando de los "potentes" datos de audiencia de la TVG, "cuanto más" al ser una televisión "de carácter autonómico". "Por tanto, me alegro de que los gallegos aprecien las emisiones y la calidad de la televisión pública de Galicia", ha concluido.

Hay que señalar que en los últimos días, a los episodios relacionados con la manipulación informativa y los abusos laborales se ha sumado uno nuevo denunciado por sindicatos y comité intercentros. Según estos órganos, el pasado 16 de febrero a un trabajador con 25 años de experiencia y permanencia en la radio gallega se le comunicó su traslado a un programa de la televisión pública. El motivo, según el comité de la CRTVG este cambio se producía “apenas 24 horas después” de que el periodista se negara “a modificar una noticia sobre la subida del IPC elaborada” para uno de los espacios informativos de la radio gallega.

La denuncia pública del comité señala que en la noticia original se hacía una comparativa entre la subida de precios en Galicia y en el resto del Estado, en la que, tal y como se desprende de los datos oficiales, la comunidad gallega no sale bien parada con un incremento muy superior a la media. La noticia, finalmente, se emitió centrándose solo en el nacional, en la inflación subyacente y en la subida de los alimentos. El dato regional se incluyó al final y de soslayo.

El lunes, finalmente, se hizo efectivo el cambio y el periodista fue trasladado “para mejorar su productividad”.