Las televisiones autonómicas se han convertido, por obra y gracia de algunos partidos políticos, en altavoces de la propaganda del gobierno de turno. Uno de los ejemplos más sangrantes se vivió en la Comunidad Valenciana con el antiguo Canal Nou. Los profesionales de la televisión (y radio) pública valenciana sufrieron en sus carnes la manipulación, las redacciones paralelas y el desmantelamiento de lo público para favorecer a empresas audiovisuales privadas. El resultado final fue el cierre del canal y el despido de un buen número trabajadores públicos.

En Madrid, con la lideresa Esperanza Aguirre al frente, sucedió casi lo mismo. Los tribunales y la salida de Aguirre salvaron unos medios públicos (Telemadrid y Ondamadrid) que poco a poco va remontando el vuelo, pero después de pasar por momentos más que tensos con respecto a su continuidad.

Galicia no es ajena a esto, no en vano la TVG funciona desde 1985, siendo la tercera televisión autonómica en echar a andar tras Euskadi (1982) y Cataluña (1983). Desde entonces, la CRTVG que incluye radio y televisió ha estado en manos de Gobiernos del PP, con la excepción de los cuatro años del bipartido PsdeG-BNG (2005-2009) y esto se ha dejado notar, a tenor de las denuncias de manipulación, desigualdad de condiciones y propaganda que se repiten cada año.

De hecho, es muy conocida la protesta que llevan a cabo los trabajadores de la gallega conocida con el nombre de 'Los Viernes Negros' bajo el lema Defende a galega, y que en julio pasado cumplió 2 años. Su acción pretende denunciar, precisamente, todas esas actitudes por parte del gobierno que preside Núñez Feijóo que restan cualquier atisbo de interés público y general que marca como objetivo cualquier televisión autonómica.

La parlamentaria socialista, Noa Díaz, recordó este martes la situación por la que atraviesa lo CRTVG y trasladó al máximo responsable de la corporación, Alfonso Sánchez Izquierdo, la exigencia de que se dé cumplimiento “de una vez por todas” a la Ley de Medios Públicos para poner fin “a la manipulación informativa por parte del PP”.

Díaz hizo estas aseveraciones en la Comisión de Control de la CRTVG marco en el que también abogó por la “necesidad de poner fin al uso partidista que la Xunta hace de la radio y televisión públicas”.

Feijóo desapareció con los rebrotes

Se da la circunstacia de que, durante la pandemia, ante los datos que ofrecía Galicia y que eran menores en contagios y muertes por COVID-19, no era extraña la presencia de Núñez Feijóo en persona o de forma indirecta tanto en programas informativos, como en otro tipo de espacios.

Ya en verano, cuando los rebrotes también situaron esta región en una situación de verdadera emergencia sanitaria, el presidente de la Xunta prácticamente desapareció de escena. Incluso algunos políticos de la oposición llamaron la atención sobre este particular, al entender que era el momento en que debía dar la cara para ofrecer las explicaciones oportunas.

Este martes, la diputada del PSdeG le recordó al director general de la Corporación pública que las denuncias sobre la ausencia de pluralidade “vienen de muchos colectivos como Defende a Galega, el Comité intercentros de la CRTVG o el Colegio de Periodistas”.

En este sentido, Noa Díaz agregó que, siendo un problema que viene de años atrás, ha sido durante este período de crisis sanitaria y campaña electoral cuando esa manipulación informativa “y el control político se intensificaron hasta niveles escandalosos”. Así, mencionó que la presencia constante y casi perpetua de Feijóo en los informativos contrastó con el silencio casi sepulcral para las declaraciones de los partidos de la oposición y esto “no tiene jusitificación democrática”.

123 Viernes Negros

A modo de ejemplo, citó lo ocurrido en un día de campaña electoral en Verín. Hasta allí se desplazó Feijóo y fue recibido con una gran cacerolada que “fue recogida por todos los medios nacionales y silenciada en la Televisión de Galicia”. Sin embargo, esa misma jornada, en el mismo informativo “la noticia destacada de la TVG fue que a las puertas de un mitin del candidato socialista, Gonzalo Caballero, había una concentración de trabajadores de Alú Ibérica”.

Díaz también confirmó que los trabajadores de los medios públicos lleván 123 viernes negros, “vistiendo de luto y reclamando que se respeten los principios de pluralidad, imparcialidad, neutralidad y veracidad informativa”.

Para el final, en su alocución ante la Comisión, la representante socialista aludió a que el Comité intercentros de la CRTVG denuncia desde el inicio de la pandemia “las estrategias de manipulación informativa” basadas, principalmente, en “criticar y desprestigiar la gestión de la pandemia por parte der Goberno central” para, a su vez, “enaltecer las actuaciones de la Xunta de Galicia”.