La dirección nacional del PP ha mantenido una reunión con los portavoces molestos dentro del partido en la provincia de Cuenca. En ella, los alcaldes y portavoces pedían no agotar los plazos y tener tiempo suficiente para elaborar listas de candidatos y programas, ya que según la dirección nacional el problema eran los malos resultados electorales.
La reunión fue larga, con una duración de más de tres horas y la participación de unos 80 alcaldes y portavoces populares. El PP de Castilla-La Mancha ni siquiera llegó a estar representado y los miembros de la Junta Gestora, presidida por José Martín-Buro, no intervinieron.
En la misma, donde hubo un tono muy bronco y elevado por las discrepancias entre Génova y la dirección provincial, participó el coordinador de Organización, Ángel González, muy cercano a Miguel Tellado. Según recoge EuropaPress, hubo miembros de la reunión que aseguraron que “hubo la bronca que tenía que haber”, lo que evidencia la crisis por la que atraviesa el PP en Cuenca, que sigue avanzando hasta llegar a involucrar a la dirección general en un intento de apaciguar a los alcaldes y portavoces en desacuerdo.
Génova trata así de calmar los ánimos garantizando un proceso interno democrático, como pedía el comunicado que publicaron los 104 alcaldes y portavoces del PP de Cuenca, y cede así a la convocatoria de un Congreso Extraordinario en seis meses.
La Junta Gestora no ha caído de pie en el seno provincial del partido, y una de las principales razones ha sido el ‘cese’ de Benjamín Prieto, presidente del PP de Cuenca desde 2012 al que la dirección general invitó a dimitir tras los malos resultados electorales.
Ahora no se descarta que Prieto vuelva a ser elegido en ese Congreso Extraordinario, ya que cuenta con el apoyo del partido a nivel provincial, como se está pudiendo comprobar, y ha expresado en sus redes sociales que sigue trabajando para Cuenca y que no ha abandonado el partido.
La dirección general del PP se ha visto contra la espada y la pared ante la protesta de sus propios afiliados en la provincia. Es más, la Junta Gestora impuesta fue rechazada desde el primer momento, incluso con dimisiones internas en las primeras horas. Además, un afiliado impugnó la Junta Gestora por contar con miembros no afiliados al PP, algo no permitido según el artículo 5 de los propios Estatutos populares