La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha vuelto a pedir el voto masivo para el PP a la vez que ha vuelto a discrepar de su partido por la ilegalización de Bildu

"En todo momento como si nos faltaran quince escaños. Hay que trabajar hasta el final. Ahora lo que queda es esperar a la urna, que genera un abismo. Me provoca tal respeto que lo que espero es que llegue el domingo y que haya un voto masivo para que ninguna persona de izquierdas haga trampas", aseguraba en EsRadio sin aclarar si cree que en Madrid haya fraude electoral "hay que actualizar los digitales para ver qué pasa".

Con respecto a los casos de compra de votos, que afectan tanto al PSOE aunque PP a pesar de que el activismo mediático solo señala los de la izquierda, Ayuso ha aseguradi que "las institituciones están funcionando gracias a la Policía, la Guardia Civil y los jueces", comentaba al respecto. "A dos días tengo claro que hay que ir a votar masivamente para que si hay alguna trampa no funcione", explicaba diciendo que el PP velará por el resultado gracias a sus "60.000 afiliados". En ese momento, hablando de pactos, ha evitado lanzar un mensaje explícito a la candidata del PP en Extremadura, María Guardiola, que ha dejado entrever un pacto entre PP y PSOE para dejar fuera a Podemos y Vox. "Yo no pactaría nunca con el PSOE de Sánchez. Ojalá volviéramos a aquellos momentos en los que estábamos de acuerdo en lo importante. Yo he pactado con Vox y Ciudadanos, que es lo lógico", espetaba a su compañera.

"Él buscará su interés particular. Nunca le ha importado ni el PSOE ni España, la tiene abandonada a su interés personal . Está tardando en dar explicaciones de la compra de voto y dejar de tratar a su electorado como ganado. Ayer en un mitin tuvo la desfachatez que en Madrid hay que hipotecarse para pagar un tratamiento oncológico", explicaba asegurando que declaraciones así "demuestra cómo trabaja, cómo se toma todo". 

"No cabe tanta indignidad. Tomará el camino que más le convenga. Es la tarea que tenemos por delante. La izquierda ha sido siempre una maquinaria de retener el poder", indicaba Ayuso poniendo con ejemplos en Andalucía esas formas a las que hace referencia.

"Lo hemos visto estas semanas en campaña con las listas de Bildu. Es una erosión inmensa. Llevamos así cuatro años, contando qué clase de Gobierno tenemos. No hemos dejado de trabajar, hay que ir a votar con ganas, masivamente para que aunque traten de hacer lo que sea la opinion del pueblo se vea reflejada el domingo", aseguraba reviviendo de nuevo el fastasma, sin pruebas, del fraude electoral en Madrid.

Por ello, ha pedido que le voten para la absoluta. "El crecimiento de 30 a 65 escaños. Solamente pensar que ese voto repite es que no he decepcionado es maravilloso. Decepcionar lo llevo mal, es una cuestión de principios. Quiero una absoluta por muchos motivos. Me gustaría demostrar que con trabajo, las banderas de la izquierdas se caen. Es mi objetivo, hay que ser consciente de que no es fácil, hay mucho en contra. Me siguen pancartas hasta la puerta de la emisora", indicaba Ayuso a Federico Jiménez Losantos.

En ese momento, el locutor ha hecho referencia a la "secta El Yunque", cuya asociación Hazte Oír ha acosado a Ayuso a la entrada a la emisora. "No estoy a favor del aborto, yo no mutilo a nadie y que si me persiguen con un bus naranja, aparte de salir monísima, parece que es Ciudadanos el que pide el voto para mi, que le cambien el color", decía al respecto.

En ese momento, Ayuso era preguntada por la opinión de varios miembros de su partido como Borja Sémper, que aseguraba que es legítimo pactar con la formación de Arnaldo Otegi. La candidata aseguraba que su posición respecto a la de su partido es conocida. "Nos tenemos que asegurar por todas las vías legales, porque no es venganza, es justicia, que hicimos todo lo posible en el marco legal para que esa gente siga ahí. No es pasado, es futuro. Lo siguiente es Navarra, paralelamente es Cataluña y viene Valencia, Baleares, La Rioja", exponía asegurando que "esta gente va con todo".

Por ello, señalaba directamente a los grupos parlamentarios del PP en el Congreso y Senado para que pidieran legalmente al Supremo que revise la Ley de Partidos en el caso de Bildu. "A través del Senado o a través del Congreso, si una mayoría de diputados lo pide, el Supremo tiene que revisar la Ley de partidos", exponía en el programa lanzando el enésimo recado de la campaña a Alberto Núñez Feijóo. 

La amplia mayoría, un balón para Almeida

Los últimos días de campaña, aparte de sembrar dudas sobre el proceso electoral, están sirviendo para que Ayuso redoble su mensaje pidiendo el voto para conseguir una "amplía mayoría" en torno al PP en las elecciones. O Sánchez o ella. O Almeida o Sánchez.

La intención de quitarse el lastre de Vox condiciona los últimos días de campaña. De esta forma, tratan de reunificar el voto de la derecha y aislar a Javier Ortega Smith en el Ayuntamiento, donde los datos internos dejan en una situación más complicada al PP. "La gestión del Ayuntamiento no puede verse condicionada según sopla el aire, ya por la necesidad de notoriedad o por la inexperiencia", ha asegurado la presidenta en las últimas horas.