El portavoz de Hacienda del Grupo Parlamentario Socialista, Antonio Ramírez de Arellano, ha calificado el Presupuesto de la Junta de Andalucía para 2021 de “falto de coraje y ambición política, y confeccionado para salir del paso”. En unas circunstancias sanitarias, económicas y sociales tan graves como las que atravesamos por la pandemia, las cuentas públicas andaluzas son “una prórroga encubierta, no blindan ni consolidan los servicios públicos, como pedíamos los socialistas. Están adelantando un panorama terrorífico para los servicios públicos el año próximo”.

Ramírez de Arellano ha señalado que “no es el presupuesto que Andalucía necesita”, y ha detallado que la partida para salud se recorta en 200 millones de euros. Si lo comparamos, no con el presupuesto inicial de 2020, sino incluyendo todas las modificaciones presupuestarias de este año, son 11.927 millones, mientras que la cantidad prevista para 2021 es de 11.721 millones.

Igualmente, se ha preguntado dónde están los más de 300 millones que el Gobierno de España ha destinado del Fondo Covid para Educación cuando la partida para 2021 solo contempla un incremento de 70 millones. Mantienen además el plan de contingencia “en lugar de distribuirlo en gastos que ya saben que se van a producir. Hasta en eso hacen una prórroga, un plan que está sujeto a la más absoluta opacidad”, apuntó.

En este sentido, el portavoz socialista ha criticado la propaganda del gobierno andaluz hablando de un aumento del 3,7% en los presupuestos, que proviene de compararlo con el presupuesto inicial y no con la realidad del año 2020. Si atendemos a las modificaciones y aumentos, como el Fondo Covid del Gobierno etc., “el verdadero incremento es prácticamente cero”, aseveró. De hecho, destinan a salud un 28% del presupuesto, la misma cantidad que destinó el gobierno socialista en 2018, sin pandemia, relató.

Ramírez de Arellano ha lamentado asimismo la “falta de voluntad de consenso por parte del gobierno andaluz, ni en el proceso de aprobación ni en el propio presupuesto. Los partidos del gobierno están engañando con un espíritu de consenso que no tienen y siguen considerando a Vox su socio prioritario, pese a que han podido optar”. Ahora “se nos exige que hagamos aportaciones al presupuesto, ya presentado y aprobado. Eso no es una negociación”.

“Buscar consensos requiere convicción y liderazgo, algo ausente en el gobierno andaluz, como está demostrando en la gestión de la crisis sanitaria”, ha indicado Ramírez de Arellano, quien ha hecho hincapié en que, con los miembros del ejecutivo de PP y Ciudadanos “están contribuyendo a la incertidumbre ofreciendo informaciones y opiniones contradictorias. No están actuando para reducirla, como tendría que hacer y no explican las medidas ni la toma de decisiones”.