Solo en Sevilla, la Marea Blanca cifró en 20.000 personas las asistentes a su convocatoria, aunque la Policía Nacional rebajó la cifra hasta 4.000. Las calles del centro de Cádiz, Algeciras o Granada también fueron escenario de la movilización popular en defensa de la sanidad pública, universal y de calidad, y contra la paulatina privatización que que viene llevando a cabo el Gobierno de Juan Manuel Moreno. Todos los partidos de la izquierda se sumaron a las protestas.

Para la Marea Blanca es evidente el “deterioro progresivo" de la sanidad pública en Andalucía, “con listas de espera que afectan a más de 800.000 personas, demoras excesivas para ser atendido en los centros de salud, falta de personal sanitario, etcétera, lo que está afectando a la población más vulnerable con menos recursos y a las personas mayores".

La coordinadora andaluza de Mareas Blancas, convocante de las manifestaciones, hacía un llamamiento a toda la ciudadanía “a tomar conciencia de esta realidad de desmantelamiento de lo público: sanidad, educación, pensiones bajas, dependencias, residencias de mayores y debemos afrontarlas organizadamente y con movilizaciones haciendo valer nuestra fuerza social".

Sus principales reivindicaciones son estas: estabilización de los 12.000 "falsos contratos Covid”; 4.000 contratos nuevos estables en atención primaria para la atención presencial en 48 horas, 12 minutos por paciente, urgencia rural y atención comunitaria preventiva; 4.000 contratos nuevos en hospitales para mantener abiertos por la tarde --hasta las 22,00 horas-- 20 centros andaluces en funciones necesarias para combatir las listas de espera; la construcción y dotación de los centros públicos necesarios u obsoletos; la dotación adecuada en salud mental y salud pública;  el aumento del personal en las residencias de mayores; profesionales adecuadamente retribuidos; freno a las privatizaciones y un plan contra el "despilfarro" en el gasto de farmacia.

La Junta se defiende con datos

Desde la Junta de Andalucía, la consejera de Salud y Consumo, Catalina García, aseguraba en una nota pública que los 12.000 profesionales sanitarios, hasta ahora con contratos Covid, seguirán en 2023 en el Servicio Andaluz de Salud: “Es nuestra voluntad que así sea. Estamos trabajando con Hacienda para elaborar los planes de contratación”.

García negó que se estuviera produciendo ese “deterioro progresivo” de la sanidad pública que denuncian las Mareas pero que también perciben desde hace años los usuarios en su día a día. La consejera volvió a esgrimir sus datos para demostrar lo contrario: "Contamos con 34 centros sanitarios y sociosanitarios más, 30.000 profesionales que se han incorporado al SAS y un incremento de casi 5.000 millones de euros en el Presupuesto de la Junta para sanidad respecto a 2018. Hoy Andalucía destina 460 euros más en salud por habitante que hace cuatro años".

También dijo la demora media en Atención Primaria en consulta presencial ha pasado desde su pico máximo de 5,87 días el 28 de diciembre de 2021 a 3,1 días en la actualidad. Nadie niega que las cifras de la Junta puedan ser ciertas, pero la Administración no debería hacer oídos sordos a un clamor fundado en la experiencia cotidiana de las familias.

La manifestación de Sevilla partió desde el Palacio de San Telmo hasta las Setas, apoyada por partidos políticos de izquierda, sindicatos y movimientos sociales y vecinales bajo el lema 'En defensa de nuestra sanidad pública'. La Marea Blanca de Huelva, por su parte, se suma a la marcha en la capital andaluza, en la que también participarán representantes de la Asociación 'Basta ya Málaga'.

En Granada, unas 1.000 personas según los convocantes participan en una concentración en la céntrica Fuente de las Batallas. En la capital gaditana se está celebrando en la Plaza de San Juan de Dios, mientras que en Algeciras está teniendo lugar en el Hospital Punta Europa, organizada por la Coordinadora comarcal en defensa de la sanidad pública.

Representantes políticos de las diferentes formaciones de izquierda de Andalucía han acudido a las protestas por la mejora de la sanidad pública. La portavoz socialista de la Comisión de Salud y Consumo del Parlamento de Andalucía, María de los Ángeles Prieto, estuvo en la concentración de Granada: “La sanidad pública andaluza –dijo– no puede más, hay que parar las listas de espera, mejor la atención primaria, contratar más profesionales y frenar la privatización. Basta ya de trasvasar dinero de la sanidad pública a la privada para hacer negocio. Le pedimos al Gobierno de Juanma Moreno mejoras urgentes y necesarias”.

El portavoz adjunto del grupo parlamentario Por Andalucía y diputado de Podemos Andalucía, Juan Antonio Delgado, también participó en la protesta de la capital hispalense:” La sanidad está en la UCI como consecuencia de las políticas del PSOE antes, y ahora del PP", dijo. Delgado también pidió a Moreno que "deje de hablar de la herencia recibida", ya que "ya va para cuatro años que podría haber hecho cosas y tiene que hacer más por la sanidad y no dejarla morir utilizando el modus operandi de la presidenta de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, o como hicieron Esperanza Aguirre o Mariano Rajoy, recortando miles de millones en el presupuesto de la sanidad pública con la excusa de los recortes".

El coordinador de IU Andalucía, Toni Valero, aseguraba, antes de participar en la manifestación de Sevilla, que el presidente de la Junta de Andalucía, "tiene que tomar nota porque esta manifestación está siendo un éxito, hay un hartazgo de la ciudadanía, cansada de pedir cita en Atención Primaria y no llega, de que los niños estén enfermos y el pediatra no les atienda”. Además, "uno de cada cinco andaluces son pacientes que tienen cáncer y no lo saben porque las pruebas no les ha llegado a tiempo".

La portavoz de Adelante de Andalucía, Teresa Rodríguez, que estuvo presente en la concentración en Cádiz, recalcó que "cuando uno lleva políticas fiscales y de gestión similares a la de Madrid se encuentra una respuesta ciudadana similar". Para Rodríguez, “nuestra calidad asistencial va disminuyendo a pasos agigantados; Andalucía está entre las comunidades autónomas donde más crecen las derivaciones y la financiación de la sanidad privada. Hay que decirle a este gobierno que no tiene mayoría absoluta en la calle para recortar en sanidad pública y beneficiar a las empresas privadas".