La localidad serrana de Grazalema ha recordado este sábado a las '17 rosas', víctimas de la guerra civil, a quienes este pueblo gaditano ha rendido homenaje en su cementerio.

Fosa declarada Lugar de la Memoria Histórica
Setenta y siete años después del asesinato de estas mujeres, que entonces contaban entre veinte y treinta de edad, han recibido el reconocimiento de su condición de víctimas. La fosa se ha declarado Lugar de Memoria Histórica. Al acto han asistido la alcaldesa del pueblo, María José Lara, y la presidenta del PSOE andaluz. Micaela Navarro. La presidenta regional socialista  trasladó a los asistentes un mensaje de "solidaridad y de cariño" de la presidenta de la Junta Susana Díaz, que "aunque no ha podido acudir al homenaje, apoya y siente como una causa propia la lucha por los valores que representaron esas mujeres asesinadas".

Labor de las asociaciones de Memoria Histórica
El cementerio del municipio ha sido reconocido como uno de los 34 lugares de la memoria democrática en Andalucía y al que han asistido la presidenta del PSOE de Andalucía, Micaela Navarro, y el presidente del PSOE de Cádiz y consejero de Presidencia, Manuel Jiménez Barrios. Este ha explicado que "el emotivo acto acompaña una larga tarea realizada por las asociaciones de memoria histórica, con el que pretendemos reparar y poner en su justo término lo que los familiares vienen reclamando desde tanto tiempo y es la oportunidad para devolver la dignidad como pueblo a las cosas que todos llevamos en el corazón".

Asesinadas y torturadas
En el verano de 1936, las 16 mujeres, tres de ellas embarazadas, y un niño fueron asesinadas y torturadas. Fueron enterradas con sus nombres en 2009, después de una investigación histórica rigurosa, que las sacó de la fosa común.

Las sacaron una noche de sus casas, las llevaron a Los Alamillos y allí, al lado de la carretera, las asesinaron e inmediatamente las enterraron en una fosa. Foto Junta de Andalucía



Crimen atroz y espectáculo dantesco
Mantienen que en el verano de 1936, 15 mujeres  y un niño, todos vecinos de Grazalema, fueron obligados a cavar su propia tumba cerca de la denominada carretera de Ronda. Posteriormente, los 16 fueron torturados brutalmente hasta la muerte por las manos de los falangistas. Así lo mantiene y lo narra Joaquín Ramón Gómez, alcalde de Benamahoma y vicepresidente de la Asociación Provincial de Memoria Histórica y Justicia de Cádiz.

Dos niños hijos de las asesinadas
Según la web 'Memoria Libertaria' "cuentan que eran diecisiete vecinas de Grazalema, que tenían entre 20 y 30 años de edad, que las sacaron una noche de sus casas, las llevaron a Los Alamillos y allí, al lado de la carretera, las asesinaron e inmediatamente las enterraron en una fosa. Cuentan que con ellas iban dos niños, hijos de una de las asesinadas. Y cuentan que eso lo hicieron las autoridades franquistas en una fecha comprendida entre 1936 y 1939, en los años de la Guerra Civil".