Parafraseando el célebre “mal día para dejar de fumar” que repetía aquel ejecutivo de ‘Aterriza como puedas’ obligado a gestionar una situación infernal en el aeropuerto de Chicago, el socialista Juan Espadas bien podría haberse lamentado de que este jueves 2 de junio era mal día para arrancar una campaña electoral.
Ocho horas después de publicarse, los fúnebres ecos de la encuesta preelectoral del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) que augura un estancamiento del PSOE y un triunfo arrollador del PP todavía podían sentirse en la pequeña plaza del casco antiguo de la capital jienense que los estrategas socialistas han elegido como escenario del mitin de inicio de la campaña que culminará el 19 de junio.
Militantes y cargos públicos del PSOE intentan sobreponerse del mazazo sufrido hoy y no renuncian a dar la batalla, conscientes de que su gran reto es lograr la movilización de sus votantes. Ese fue, de hecho, el principal mensaje lanzado a los suyos por Espadas, un político con muchas cualidades y bien dotado para el pacto y la gestión pero entre cuyas virtudes no figura la capacidad de enardecer a las masas.
Tampoco, por cierto, es precisamente un Emilio Castelar el candidato del PP Juan Manuel Moreno, pero cuando se tiene el viento de popa no es preciso ser un intrépido capitán ni un orador de excepción para arrancar vivas y apalusos. El partido conservador eligió Málaga primero y Sevilla después para cumplir el rito de un arranque de la campaña que nunca, ni siquiera cuando en 2012 aventajó al PSOE en votos, les había sido tan propicio.
Los cientos de simpatizantes populares que se agolpaban en el parque Balsa Decantación de Málaga también conocían, cómo no, la predicción del CIS, habitualmente –aunque no hoy– desacreditado por los medios conservadores. La moral de la tropa azul no puede estar más alta. En 2018 creían que no gobernarían y se encontraron con la sorpresa de verse de un día para otro en San Telmo; en 2022 ni siquiera temen la sorpresa contraria: esta vez están seguros de seguir gobernando... aunque sea de la mano de Vox. Neutralizar el empuje de la ultraderecha es el gran objetivo del PP.
Entre gritos de ‘se nota, se siente, Juanma presidente’ y rodeado de un mar erizado de banderas sobre todo andaluzas y solo unas pocas españolas, un Moreno él mismo eufórico intentó contener la euforia de los suyos alertándolos de que “las encuestas no ganan las elecciones” y recordándoles que no olvidaran acudir a las urnas el 19 de junio: “Hay muchos días para ir a la playa, pero solo uno cambiar Andalucía”.
Por su parte, el secretario general del PSOE de Andalucía y candidato socialista a la Presidencia de la Junta, ha estado arropado en el acto de Jaén por la vicesecretaria general del PSOE, Adriana Lastra; el secretario general del PSOE provincial de Jaén, Francisco Reyes, y el secretario general del PSOE local y alcalde de la ciudad, Julio Millán.
La propia elección para iniciar la campaña de un espacio tan modesto como la plaza de San Juan de Jaén, capital de una de las provincias andaluzas de mayor tradición socialista, parece denotar una cierta inseguridad del Partido Socialista de Andalucía, como si lo atenazara el temor de no ser capaz de llenar un recinto de mayores dimensiones.
En tono cometido pero firme, Juan Espadas, que ha prometido "dejarse la piel y lo que haga falta", ha instado a los suyos a movilizarse, "a salir con ilusión, con ganas y con una sonrisa a la calle". El PSOE de Andalucía, ha recordado, es un partido "fuerte, unido y centrado en lo importante", un partido que tiene "47.000 militantes, en todos y cada uno de los rincones de Andalucía, capaces de entender cuando Andalucía los llama, y ahora nos necesita: si votamos todos, ganamos estas elecciones"
Por su parte, la palabra que más ha repetido el candidato del PP-A a la reelección como presidente de la Junta de Andalucía ha sido 'serenidad' y sus derivadas. Moreno les ha dicho a los suyos que hay que lograr una "mayoría serena", que el PP encarna la "Andalucía en calma, la Andalucía que no chilla", la que ganará la batalla del 19-J "con serenidad" porque tiene un "proyecto capaz, refromista, sereno".
Aun así, ha insistido en varias ocasiones: "No nos fiemos de las encuestas, todavía no hemos ganado nada". Pero por si a alguno le cabían dudas, el candidato ha querido despejarlas con esta proclama: "Tenemos unas ganas de comernos el mundo que no nos para nadie".
También ha advertido además de que todo lo que se ha construido con mucho esfuerzo de esta legislatura puede desaparecer si la alternativa que hay enfrente, siete partidos de la izquierda que conformarían un gobierno "Frankenstein" toma las riendas de esta comunidad.
