Cayetana Fitz-James Stuart y Silva recibió los títulos de Hija Predilecta de Andalucía y también de Sevilla otorgados por la Junta y por el Consistorio hispalense respectivamente. EFE/Archivo Cayetana Fitz-James Stuart y Silva recibió los títulos de Hija Predilecta de Andalucía y también de Sevilla otorgados por el Gobierno andaluz y por el Consistorio hispalense respectivamente. EFE/Archivo



Tras conocerse el fallecimiento de la Duquesa de Alba se han podido ver y oír declaraciones, portadas de periódicos y expresiones de todo tipo desaforadas, reivindicando y exaltando el amor de Doña Cayetana por Sevilla y Andalucía. Hasta le punto de que se ha conocido una confesión de la fallecida en el sentido de que su deseo hubiera sido nacer en Sevilla.

Un "amor" sureño no correspondido con impuestos
Amante de las tradiciones andaluzas, de su cultura, con un ingente patrimonio histórico y artístico en la comunidad, recibió los títulos de Hija Predilecta de Andalucía y también de Sevilla otorgados por la Junta y por el Consistorio hispalense respectivamente. Pero ese "amor" por esta tierra de Cayetana Fitz-James Stuart no se corresponde en absoluto con los ingresos que derivados de su patrimonio, de sus actividades empresariales y ahora de la sucesión de bienes, debería haber sido ingresados en la tierra donde había establecido su residencia.

Corazón andaluz, bolsillo madrileño
Cayetana, de vocación muy andaluza, residente en Sevilla y enamorada del Sur pero fiscalmente miró hacia Madrid. Y es que la Grande de España tenía su residencia fiscal en Madrid. A ello coadyuvó que la Comunidad presidida por Ignacio González tiene los tipos impositivos más bajos en determinadas materias que afectan a las grandes empresas o el propio Impuesto de Sucesiones.

Ahorro de impuestos tributando en la Comunidad de Madrid
Hoy el diario El Mundo revela que esta situación tributaria con residencia fiscal en el madrileño Palacio de Liria le generó un importante ahorro cuando adelantó a sus hijos parte de su herencia en 2011. También continuó ahorrándose pago de impuestos en Madrid y no en Andalucía en las posteriores declaraciones de Impuesto de Patrimonio.

Los ricos pagan menos en Madrid que en Andalucía
El Gobierno andaluz mantiene una presión fiscal más alta que la que ejerce la Comunidad de Madrid. Dicho de otra manera, en Madrid los ricos y las grandes fortunas pagan menos que en Andalucía. También se ha conocido que la recaudación del Impuesto de Sucesiones y otros tributos y tasas de carácter autonómicos que hay que abonar tras el fallecimiento de Doña Cayetana corresponderán a la Comunidad de Madrid y no a la que preside Susana Díaz.

La Fundación exenta de tributos
Recientemente un informe de los Técnicos del Ministerio de Hacienda (Gestha) certificaba que el 90% del patrimonio de la Casa de Alba, estimado entre 2.200 y 3.200 millones de euros, no tributaría por estar catalogado como Patrimonio Histórico así como por haber cedido obras de arte y antigüedades a la Fundación Casa de Alba. Fundación, dicho sea de paso, administrada y dirigida por los propios descendientes de Doña Cayetana.

Los hijos residen en Madrid
De esta forma se deduce que la cantidad libre de impuestos se hallaría entre los 2.065 y los 2.875 millones. Tampoco no la totalidad del patrimonio de la Casa de Alba tributa de la misma manera. Como hemos reseñado anteriormente está en función de la comunidad autónoma en la que resida su titular y en la que se ubiquen las propiedades inmuebles. Los impuestos sobre sus bienes inmobiliarios se abonan en las autonomías donde se hallan, mientras que los otros bienes como acciones en empresas o depósitos bancarios, tributan en la comunidad en la que reside el heredero. Casualmente la mayoría de los hijos y nietos de la duquesa residen en Madrid, donde el Impuesto de Sucesiones y Donaciones está bonificado al 99 %.

Por 3.200 millones pagan solo seis
Resumiendo, por un patrimonio de 3.200 millones Hacienda solo recauda 6 millones de euros, un 0,2%. Por las obras de arte y antigüedades en caso de no haber sido cedidas a la Fundación, la liquidación a las arcas del Estado hubiera ascendido a 57,8 millones. Lo dicho, corazón sureño, bolsillo madrileño, muy andaluza la Duquesa pero muy fiscalmente madrileños los Alba.