Mientras se conocían con cuentagotas los resultados de estas elecciones que desde el partido han calificado como “históricas”, el Teatro Goya se llenaba de gritos de sorpresa y felicidad que se entrelazaban con dos palabras claves a lo largo de la campaña y de esta noche de domingo: “remontada” y “presidente”.

Pero pronto, la alegría se ha ido apagando hasta convertirse en silencio, pero silencio de la cúpula, que solo han salido a dar declaraciones en una ocasión. Haciénsose esperar algo más de una hora, el director de campaña de Podemos, Íñigo Errejón, ha salido a valorar unos resultados que ha calificado de “remontada” que “abren una nueva etapa política”.

Aun así, Errejón ha asegurado que no van a valorar los datos hasta que no sean definitivos y tiran de prudencia.

Poco después, lo que eran gritos de entusiasmo que incluso han interrumpido a la petición de prudencia de Errejón, lo que se escuchaba por todo el teatro a ráfagas de remontada; se ha convertido en una calma tensa de nerviosismo y silencio, esta vez un silencio también de los seguidores. 

Lleno absoluto en las calles
La otra cara se está viviendo en las calles. Especialmente en la Plaza del Reina Sofía, lugar habitual de las celebraciones de Podemos. Con un lleno casi absoluto y globos morados, los seguidores de la formación soportan el frio con ilusión y vítores de alegria. Dos formas de sentir esta jornada electoral muy diferentes.