El próximo domingo cambia la hora en España –a las 3 de la mañana volverán a ser las 2-, y en Baleares, la primera comunidad de España en la que sale y se pone el sol, con una diferencia de 50 minutos respecto al punto más occidental del país –Galicia-, los grupos políticos que forman parte del Parlamento autonómico han firmado una declaración institucional impulsada por los econacionalistas de MÉS Menorca para pedir al Gobierno central que se mantenga el horario de verano,  ya que a partir de las 17:50 deja de verse la luz del sol en el archipiélago. El Ministerio de Industria ha hecho público un comunicado detallando que todos los miembros de la UE están obligados a cambiar la hora, en cumplimiento de una directiva europea 2002. Pero, ¿por qué piden los grupos baleares no modificar el reloj? En primer lugar, porque Baleares es la comunidad a la que más afecta el cambio de hora, debido a su ubicación. A partir del domingo, el sol se pondrá a las 17:45 en Mahón, con una diferencia de casi 50 minutos con otras ciudades del oeste de la península como Lugo.

Salud, conciliación, ahorro energético

En su declaración, los grupos parlamentarios baleares reclaman tener un horario “racional, lógico y natural”,  ya que “la sociedad moderna necesita que las horas de sol se adapten a su tiempo de ocio”, concluye, ya que el astro rey es “clave” para la salud, y evita “depresión o insomnio” y fomenta las actividades al aire libre. También se aduce como motivo para dejar en paz las manecillas el fomenta del ahorro energético, con la reducción del consumo eléctrico, y una mejor conciliación de la vida laboral y familiar gracias a las tardes más largas. Los grupos políticos consideran, además, el uso horario vigente totalmente obsoleto en su justificación industrial, y así lo manifiestan en su escrito. De hecho, señalan también el potencial aumento del turismo, con el posible alargamiento de la jornada comercial que permitiría que hubiera más luz en el día. El cambio de hora comenzó a generalizarse en 1974, tras la crisis del petróleo y el interés de los países por ahorrar electricidad.