Los sistemas educativos han puesto en marcha grandes avances para reducir las brechas de género en el desarrollo estudiantil, pero las niñas y los niños continúan profundamente divididos en sus elecciones de carrera, que se realizan mucho antes de lo que comúnmente se piensa, de acuerdo con un informe de la OCDE, publicado a primeros de marzo.

Brecha de géneroLa OCDE señala que la división de género entre los padres, maestros y empleadores, consciente e inconscientemente, es parcialmente responsable. «A pesar del importante progreso durante las últimas dos décadas para reducir la brecha de género, necesitamos encontrar nuevas formas para hacer frente a los aspectos sociales y emocionales y despertar las mentes de los niños a sus habilidades y carreras futuras», señaló el Sub-Secretario General de la OCDE, Stefan Kapferer, al presentar el informe en Madrid. «La buena noticia es que estos resultados demuestran que lo que se requiere no es una reforma educativa ni extensiva ni cara, sino un esfuerzo concertado por parte de los padres, maestros y empleadores».

De 20 niñas sólo 1 considera estudiar la carrera de ciencia, tecnología, ingeniería o matemáticas mientras que cinco niños lo piensan, con resultados similares en la prueba PISA de ciencias de la OCDE. Es importante  este dato porque las carreras en estos campos tienen una alta demanda y están entre las mejor pagadas. Las encuestas PISA de la OCDE han mostrado que a las niñas les falta la misma confianza en sí mismas que tienen los niños en ciencias y matemáticas; los nuevos análisis revelan diferencias significativas en los incentivos de los padres que incrementan el problema.

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Los padres tienen expectativas mayores de que sus hijos trabajen en carreras de ciencia y técnicas que sus hijas, aún y cuando muestren las mismas capacidades. Los niños tienen una probabilidad mayor de tener un desarrollo escolar por debajo del de las niñas, lo cual lleva a una falta de interés y tasas más elevadas de deserción. Seis de cada diez de los que tienen resultados más bajos en lectura, matemáticas y ciencias en las encuestas PISA de la OCDE son niños.

También los niños y las niñas tienen preferencias diferentes de lectura; las niñas están más interesadas en leer novelas y revistas, mientras que los niños prefieren libros de caricaturas y periódicos. Los maestros y padres debieran tomar esto más en cuenta, dando a los niños mayores opciones de lo que leen en casa y en la escuela.

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Los maestros podrían hacer más para aumentar los resultados tanto de niños y niñas en matemáticas, una materia en la que los niños presentaron mejores resultados en alrededor de la mitad de los países participantes. Enseñar estrategias que requieran que los estudiantes expliquen cómo resolvieron un problema de matemáticas, aplicar lo que han aprendido fuera de clase y trabajar de manera más independiente, mejoraron los resultados, particularmente entre las niñas.

El informe revela que, de manera consistente, los maestros dan calificaciones más altas a las niñas que a los niños en matemáticas, aunque tengan resultados similares en la prueba de matemáticas de PISA. La evidencia sugiere que esto puede ser debido a que las niñas ponen más atención en clase y se comportan mejor y, como consecuencia,  reciben calificaciones más altas.

Los empleadores también mostraron una tendencia innata que favorece a los niños: mientras que las niñas tienen una probabilidad mayor de buscar carreras a través de Internet, los niños prefieren tener una experiencia directa trabajando como becarios, visitando ferias de trabajo o hablando con asesores vocacionales fuera de la escuela.

Informe completo en: http://www.oecd.org/pisa/keyfindings/pisa-2012-results-gender.htm.