La alcaldesa de Valencia, Rita Barberá / EFE



El concejal socialista Vicent Sarrià ha dado a conocer las alegaciones que ha presentado en nombre del grupo municipal socialista al convenio de colaboración entre el Ayuntamiento de Valencia y el Arzobispado para la obtención de la plaza de la Almoina.

Acuerdos hace dos décadas por interés arqueológico...
El interés por los terrenos tiene su origen más de dos décadas atrás, a raíz de las excavaciones arqueológicas en el solar de la Almoina, propiedad del Arzobispado de Valencia. El Ayuntamiento realizó dos convenios con dicha institución en los años 1985 y 1990 para la cesión gratuita a la ciudad. En 1996 a propuesta del PSOE el Ayuntamiento aprueba la compra del solar al Arzobispado con una superficie de 2.308 m2, pero en el año 2000 se suscribe un nuevo convenio de colaboración por el cual el Consistorio pone a disposición del Arzobispado seis solares municipales.

... que derivaron en permutas ventajosas para la Iglesia
Los socialistas valencianos alertan de que "todos estos emplazamientos se ubican en espacios emblemáticos de nuevas zonas de la ciudad, destinados a equipamientos públicos, para que el Arzobispado construyera iglesias, a la vez que se le entregaba de manera gratuita una plaza anexa a la Basílica en la Plaza Cors de la Mare de Deu, con el objetivo de utilizarla para actos religiosos al aire libre". El convenio era en régimen de concesión por 75 años y estipulaba una contraprestación simbólica por parte de la Iglesia de 2.000 pesetas anuales (12 euros). El PSOE se opuso a ese acuerdo e insistió en adquirir el solar en lo que se había valorado, 259 millones de pesetas (1,55 millones de euros).

El PSOE calcula en 11 millones la operación para el Arzobispado
A pesar de que quedaban 60 años de vigencia del convenio, el gobierno municipal del PP y el Arzobispado firman un nuevo acuerdo para formalizar la venta de cuatro de las seis parcelas, donde finalmente se construyeron iglesias, a cambio del solar de la Almoina. El PSOE hace números sobre el ruinoso acuerdo para los valencianos porque supone multiplicar por cuatro el valor de la Almoina de los 1,55 millones de euros a 6,5 millones de euros. Mientras, se asignaron a las cuatro parcelas municipales ubicadas en las zonas de mayor importe inmobiliario de la ciudad y que se vendieron a la Iglesia valores muy inferiores a los de mercado. Una operación que el PP sacó adelante "sin efectuar una tasación independiente que hubiera marcado los valores reales de las propiedades que se permutan". Sarrià advierte de que la Iglesia tendría que haber pagado por los terrenos recibidos 11 millones de euros ().

Sospechosas "prisas" de Barberá
También subraya que el convenio se introdujo en la revisión estructural del PGOU de Valencia, presentado incluso por la alcaldesa diez días antes de que ella misma firmara una resolución personal dando a conocer el convenio para su exposición pública, "con el claro objetivo de que pasara lo más desapercibido posible".

"Parece bastante sospechoso el comportamiento de la alcaldesa y las prisas con las que quiere incrementar el patrimonio de la iglesia, a costa de despilfarrar los recursos públicos", ha señalado Sarrià, que solicita en la alegación presentada que se deje sin efecto el convenio y se soliciten una tasación independiente de las parcelas que se permutan para que el patrimonio de la ciudad no salga perjudicado.