El 2014 es el año del Atlético. Tiene la suerte de los campeones y por eso esta Liga no se le escapará. Incluso gana y saca adelante los partidos cuando no juega bien. Derrotó al Elche (2-0, Miranda y Diego Costa de penalti) y salvó su primer Match ball para celebrar el campeonato. Los rojiblancos lo tienen todo de cara: a falta de cuatro jornadas mantienen la ventaja sobre Real Madrid y Barcelona.
Tres victorias, y a Neptuno
Son las cuentas de Simeone. Si el Atlético, que suma ya 85 puntos, gana tres de los cuatro partidos que le quedan (tres fuera- Valencia, Levante y Barcelona- y uno en casa, contra el Málaga) será campeón. Y encima, como aventaja en tres puntos al Madrid y en cuatro al Barça, se puede permitir el lujo de perder un partido. Incluso, aunque el Madrid ganará todo lo que le queda, perdiendo uno y empatando otro, también levantarían el título. Y el alirón lo pueden cantar en el mismo Camp Nou. ¡Lo que le faltaba al Barça!
Humildad y sufrimiento
Se nota que los jugadores del Atlético (normal con la plantilla tan corta que dispone) llegan casi sin gasolina a este final de temporada. Pero como los hombres de Simeone tienen tanta ambición y creen tanto en sus posibilidades, suplen todas sus carencias técnicas y tácticas con humildad, entrega, coraje, garra, compromiso y sobre con mucho trabajo y sacrificio. El Atlético es un bloque que nunca se rinde.
La afición, nunca falla
Simeone lo sabe a la perfección. Por eso cuando el equipo rojiblanco está espeso y no da una a derechas, el Cholo, desde su zona técnica, agita sin parar sus manos y moviliza a sus 60.000 incondicionales. Y sus fieles gladiadores, que nunca desfallecen y tampoco se rinden, llevan a sus futbolistas en volandas para sacar adelante cualquier partido. La afición rojiblanca siempre juega y es decisiva. ¡Qué se lo pregunten a los rivales del Atleti.
El martes, llega Mourinho
Menudo choque de trenes. Y de entrenadores. Simeone dice que admira a Mourinho, pero el portugués ni tiene su don de gentes, su diplomacia y su mano izquierda. Hasta la fecha, el Cholo todavía no ha metido el dedo en el ojo a ningún entrenador rival.
Viva la Champions
Martes, 20:45, en el Vicente Calderón el Atlético recibe al Chelsea en la ida de la semifinal de Champions. Aunque están fundidos, el objetivo de los rojiblancos es no encajar un gol y desquiciar a MOU y sus chicos para viajar con garantías a Londres. Los atléticos saben que están a seis partidos de hacer historia: ganar la Liga y clasificarse para la final de la Champions (24 de mayo en Lisboa). Y con la victoria de anoche ante el Elche su moral está por las nubes.