Los datos que han ido saliendo sobre la infanta Cristina, copropietaria con Urdangarin de un 50% de la propiedad Aizoon, no significan que se esté investigando también a la hija del Rey, según aseguran las mismas fuentes al diario mallorquín, que califican de "auténtico disparate"  las informaciones en varios medios de comunicación de ámbito nacional respecto al próximo encausamiento de la infanta.

Evasión fiscal
El duque desvió presuntamente a Aizoon fondos públicos conseguidos principalmente de los Gobiernos de Jaume Matas, en Baleares, y de Francisco Camps, en Valencia, y maniobró para evadir al fisco contabilizando como gastos de la empresa lo que eran gastos corrientes del matrimonio.

El desvío de casi medio millón de euros a Luxemburgo
El Mundo informa este viernes que el Instituto Nóos, la fundación sin ánimo de lucro presidida por Urdangarin entre 2004 y 2006, desvió 420.000 euros a una cuenta bancaria en el paraíso fiscal de Luxemburgo. Según los investigadores, el duque pudo ocultar a Hacienda en cuentas en Belice y Luxemburgo alrededor de un millón de euros.

A través de De Goes
El desvío de los 420.000 euros fue realizado desde una cuenta de Nóos en España hacia otra de la empresa pantalla De Goes Center for Stakeholder Management, radicada en Luxemburgo y propiedad del marido de la Infanta Cristina y de su socio, Diego Torres. De Goes, con sedes en Barcelona y Londres, depende a su vez de una empresa caribeña controlada por el testaferro panameño Gustavo Alberto Newton Herrera.

El enviado del Rey tendrá que declarar
Como ya informó ELPLURAL.COM, el Rey intentó parar los negocios de su yerno, cuando el grupo socialista en Baleares levantó la liebre sobre posibles irregularidades en los contratos firmados con el Govern de Matas con el duque. Envió a su asesor externo José Manuel Romero para que comunicara a Urdangarin que debía abandonar sus negocios y, por otra parte, supuestamente debía cerrar sus negocios.

La extraña maniobra de Romero
José Manuel Romero tendrá que declarar como testigo, según desvela Público, aunque la fecha no ha sido fijada aun por la Fiscalía Anticorrupción. El asesor del Rey tendrá que explicar por qué si tenía como misión poner fin a los negocios del duque, él mismo se convirtió en presidente de otra fundación creada por Urdangarin, Areté, y desde su puesto traspasó el patrimonio de esa entidad, 30.000 euros a una nueva entidad creada por el marido de la infanta Cristina: Fundación Deporte, Cultura e Integración Social, que es una pieza clave, según la investigación, en el desvío de fondos a Belice.