También Chaves ha dejado muy claro que nunca se ha aprovechado de su cargo para sacar beneficio y jamás ha dado ningún trato especial a ninguna empresa, hayan trabajado en ella o no sus hijos o algún otro familiar, y siempre ha tratado a cualquier empresa dentro de la normativa vigente y nunca fuera de la ley, y que ni por ningún momento se ha planteado este tema como un nuevo caso ‘Juan Guerra’, ya que en absoluto se ha producido “tráfico de influencias”.

“Antes mi hija y ahora mi hijo”

La historia se repite para Chaves, "antes era con mi hija y ahora con mi hijo", dado que con estas nuevas acusaciones sobre su hijo el PP revive el que sufrió hace dos años, cuando lo acusaron desde las filas de la derecha de que había ejercido un trato de favor a la empresa Matsa porque su hija trabajaba en ella. Y en el caso de su hijo, ha precisado el dirigente socialista que se está recurriendo a una documentación "presuntamente robada”.

Modo muy particular de la derecha

La derecha en España tiene un modo muy particular de hacer política ya que su manual es muy claro "destruir al adversario político acusando el patrimonio personal más importante, como es el honor, la honestidad y la honradez".

“Deleznable”

En cuanto a la actitud del PP de utilizar a la familia para destruir "a un adversario político" la considera “deleznable” y de aprovechados ya que así quieren hacer sombra a “una buena etapa de Andalucía”.

Abengoa en tela de juicio

Es “falso” poner en tela de juicio a la multinacional más importante de Andalucía, como es Abengoa, como lo hace la derecha por las actividades profesionales de sus hijos. Cuando esta empresa de reconocido prestigio internacional ha conseguido hace unos días un contrato del gobierno estadounidense, por más de 1.500 millones, para la instalación de la mayor termosolar en Arizona, porque su hija trabajaba allí, y  Abengoa había conseguido ayudas antes de que él llegara a ser presidente de la Junta, durante y después, con independencia de si su hija fuera una trabajadora de la empresa.

Dos profesionales liberales

Lo que ha dejado muy claro el ministro es que tanto su hija como su hijo son dos profesionales liberales y siempre tienen como principal objetivo “cumplir la ley”, que ninguno se dedica a la política y si se han "enriquecido utilizando el apellido de su padre" que vayan a la justicia y lo prueben o que si alguien cree que él ha podido favorecer a alguno de sus hijos, que también vaya a la justicia y lo pruebe.