Tom Brusse y Melyssa Pinto han salido con éxito de su paso por 'La última cena'. Los exconcursantes de 'La isla de las tentaciones' se han puesto manos a la obra para deleitar a los comensales, aunque, el también exsuperviviente tuvo que hacer frente a un testimonio que pretendía desacreditarle.

Paz Padilla enseñó a la audiencia una conversación entre un confidente del programa de La Fábrica de la Tele. Así, recibieron un vídeo de Brusse que no se podía enseñar.

"Primero, hago lo que quiero en mi vida. Si quiero estar con hombres, con chicas, con burros... lo que sea, y ya está. Si quieren hablar que hablen", decía para salir del paso avanzando "consecuencias" a la par que retaba al confidente a dar la cara y a sentarse con él en un plató.

Además, explicaba que el mencionado vídeo no lo tiene controlado aunque ya tiene a una persona demandada. "Tengo un tema judicializado porque no puedes hacer daño a la gente así", decía explicando que junto a su expareja Sandra Pica ha sido víctima de acoso y chantaje por este tema.

 

"A mí se me contó en su día, pero yo no me lo creo. Si es verdad tampoco pasa nada, es su vida y si no falta al respeto a nadie que haga lo que le dé la gana", apuntaba la exnovia de Brusse.