El pasado viernes se vivió un bochornoso momento en el debate electoral celebrado en la Cadena Ser como la candidata de Vox a la presidencia de la Comunidad de Madrid, Rocío Monasterio, como protagonista. Sus declaraciones asegurando que desde Podemos no se había condenado las agresiones que sufrió Vox en Vallecas y dudando de las amenazas de muerte que Pablo Iglesias, junto con Fernando Grande-Marlaska y María Gámez, recibieron en forma de misiva, provocaron la salida de Iglesias y la posterior marcha de los candidatos de PSOE y Más Madrid.

Esto ha sido valorado por Quique Peinado en el programa de la Cadena Ser ‘A vivir que son dos días’, de Javier del Pino. Ha sido muy claro explicando lo que se viene en la política y en la vida en general con la inclusión de Vox en los diferentes parlamentos.

“Como es desagradable y feo no es nosotros [sobre Pablo Iglesias]. Ahora hemos visto que es nosotros y que después de él vendrán otros, y al final llegará a ti, hasta le llegará a Edmundo Bal. Tuvo que pasar esto para que la gente reaccionara”, ha comenzado exponiendo.

“Hace dos años había gente que se presentaba a las elecciones de Madrid diciendo que había que hablar con Vox en la izquierda, o sea que tampoco nos pongamos locos”, ha continuado relatando. Y zanjó con un rotundo comentario: “No es una cosa que me marcara, pero lo de ayer me pareció un paso más [sobre el debate]. Por lo menos Pablo Iglesias dijo hasta aquí y un poco más tarde los demás. Espero que sea una cosa que valga para el futuro, que aprendamos que lo que viene es muy gordo. Van a por un modo de vida de todos nosotros, y eso es gravísimo”.