La Roca acaba de abrir las puertas de su nueva temporada, pero Gonzalo Miró ya se ha encargado de captar la atención en multitud de ocasiones con sus comentarios que tanto dan que hablar en las redes. Si hace una semana el colaborador creaba polémica con su opinión sobre las injurias a la Corona y la religión, este domingo no ha querido quedarse atrás. El madrileño le ha dado un tirón de orejas al rey emérito por su nuevo movimiento.
Juan Carlos I ha creado una fundación en Abu Dhabi que, según ElConfidencial, es la forma escogida para transferir a sus hijas el patrimonio que dejará en herencia. Los colaboradores del programa de laSexta cuestionaban la moralidad que se esconde tras la decisión del emérito, ya que el objetivo de la organización, al margen de dar a conocer su figura como jefe de Estado mediante la financiación de actividades educativas y culturales, es sacar provecho de la ventajosa legislación de los Emiratos Árabes Unidos, de manera que el Borbón pueda centralizar su fortuna fuera de nuestras fronteras y sus hijas puedan recurrir a ella.
"A mí me da la sensación de que nos lo estamos llevando a un debate casi ético moral", arrancaba Miró. Juan del Val intentaba interrumpirlo, pero el colaborador pedía su momento para "hacer de abogado del diablo": "Si ese debate ético y moral ya ha pasado la pantalla, lo lógico es que te preocupes de cómo van a heredar tus hijos el dinero que tienes, lo tengas donde lo tengas", añadía. La presentadora del programa, Nuria Roca, se mostraba en sintonía con su tertuliano: "La imagen no la vas a recuperar, con lo cual lo que quieres es recuperar el dinero para tus hijos".
"En la situación de él, ¿qué harías? ¿Cómo puedo yo darle mi pasta a mis hijos?", le preguntaba directamente Miró al marido de Roca. "Haciendo una fundación y ya está", respondía del Val. "Pero es que es haciendo una golfada, haciendo una fundación en la que todos son pactos", añadía una de sus compañeras. En ese intante, el madrileño recogía el guante de su compañera para describir en pocas palabras el movimiento del rey emérito: "Que sí, pero es que la golfada ya... Es que estamos ya en quinto de carrera de gollfada", sentenciaba Miró.
La fundación del rey Juan Carlos I en Abu Dhabi
El rey emérito ha creado una fundación en Abu Dhabi, lugar en el que reside desde el año 2020, con el objetivo de centralizar su fortuna en el extranjero y dejársela en herencia a las infantas Elena y Cristina. Según informaba el medio citado previamente, ha sido creada con la ayuda de un abogado español de un bufete internacional con sede en Madrid, que se ha desplazado en varias ocasiones a los Emiratos Árabes para tratar personalmente los detalles junto al moncarca: "Los trámites se han realizado con discreción para evitar otro escándalo, tras el archivo de las investigaciones contra el Rey emérito de la Fiscalía Anticorrupción y la Fiscalía del Cantón de Ginebra, Suiza", según publicó el periódico.
La fundación no solo busca preservar su legado como jefe de Estado mediante el financiamiento de actividades culturales y educativas, sino que también aprovecha las ventajas fiscales y legales de los Emiratos Árabes Unidos para gestionar su patrimonio fuera de España, permitiendo a sus hijas acceder a los fondos. Según ha informado dicho medio, en Emiratos Árabes Unidos las fundaciones disfrutan de una mínima carga fiscal, junto con un alto nivel de confidencialidad respecto a su funcionamiento y la propiedad real de sus activos. Esto implica que, al fallecer los fundadores, los herederos pueden asumir el control del patrimonio sin que se revele públicamente su identidad.
Además de la casi nula fiscalidad de este tipo de fundaciones en el país del Golfo, se suman el secreto en torno a sus normas de funcionamiento y la verdadera titularidad de los bienes, por lo que los herederos pasan a controlar el patrimonio de la sociedad una vez fallecen sus progenitores sin que tenga que hacerse pública la identidad de ninguno de ellos. Aparentemente, la creación de esta fundación responde, en parte, a la "inquietud" del exmonarca por la situación económica de sus hijas, ya que desde 2014 no reciben asignaciones de los Presupuestos Generales del Estado tras dejar de formar parte de la Casa Real. La infanta Elena trabaja para la Fundación Mapfre, donde percibe un salario de aproximadamente 300.000 euros anuales, mientras que Cristina recibe cerca de 400.000 euros de la Fundación Aga Khan, con sede en Ginebra.
Por otro lado, Juan Carlos I busca recuperar los activos que aún mantiene fuera de España. Oficialmente no dispone de patrimonio tras haber abonado más de 678.000 euros a Hacienda en diciembre de 2020 para evitar una condena por no declarar las donaciones del empresario mexicano Allen Sanginés-Krause, y otros 4,4 millones, en febrero de 2021, para regularizar los vuelos que supuestamente le regaló su primo Álvaro de Orleans