En una reciente entrevista concedida al programa Conspiranoicos de La Sexta, presentado por Jokin Castellón, El Gran Wyoming revivió uno de los episodios más polémicos de su trayectoria pública: las acusaciones de Hermann Tertsch y Miguel Ángel Rodríguez, quienes le señalaron en televisión como "camello de cocaína".

Durante la entrevista, Wyoming compartió detalles de cómo se enteró de estas afirmaciones y las consecuencias que tuvieron para él. “He sido víctima varias veces. Miguel Ángel Rodríguez, en un programa de televisión, dijo que yo era un cocainómano irredento. Hacía pareja en ese programa con Hermann Tertsch, y entre los dos hablaban de mi adicción a las drogas. Yo no he sido adicto”, declaró con contundencia.

El presentador también relató que, aunque ha experimentado con drogas en el pasado, nunca desarrolló ningún tipo de dependencia. “He probado todas las drogas, menos la heroína, y eso fue a los 17 años en Ámsterdam. Sin embargo, no he sido adicto. De hecho, trabajé en un centro de desintoxicación apoyando a unos amigos, y sé lo que implica lidiar con esas situaciones. No pasa nada por ser adicto, pero no es mi caso”, explicó.

Wyoming recordó con especial indignación las palabras de Tertsch, quien, según él, llegó a afirmar que “le pasaba cocaína a todos los jefes y que trabajaba en televisión porque era el camello oficial. El dealer”.

Víctima del bulo ultra

Por su parte, Miguel Ángel Rodríguez, exportavoz del Gobierno de Aznar, hizo estas declaraciones durante un debate en el programa El Cascabel al Gato de 13 TV. En ese espacio, Rodríguez calificó a Wyoming de "cocainómano" mientras explicaba sus comentarios polémicos sobre los funcionarios, que habían sido abordados de manera humorística en un reportaje de El Intermedio. Durante la tertulia, Rodríguez afirmó: "Y el cocainómano Monzón diciendo barbaridades", en referencia al verdadero nombre del presentador de La Sexta, José Miguel Monzón. Fue el colaborador Hermann Tertsch quien aclaró que se refería al Gran Wyoming.

Wyoming: "Me fui a ver a un abogado, y me recomendó que no hiciera nada porque, si hablaba, al día siguiente todas las portadas afines iban a decir: ‘Wyoming afirma que no vende cocaína’"

En los últimos momentos del debate, Rodríguez volvió a sacar el tema, señalando: "El cocainómano ese que sigue ahí. A saber a quién le pasa la cocaína. Lo estoy investigando".

A pesar de la gravedad de las acusaciones, el presentador decidió no emprender acciones legales tras recibir asesoramiento jurídico. “Me fui a ver a un abogado, y me recomendó que no hiciera nada porque, si hablaba, al día siguiente todas las portadas afines iban a decir: ‘Wyoming afirma que no vende cocaína’. Y eso es tanto como decir que eres el camello oficial de España. Me recomendó que lo dejara correr”, relató.

El presentador también reflexionó sobre el impacto de los bulos y las noticias falsas, destacando la necesidad de una mayor responsabilidad en los medios de comunicación. En este sentido, agradeció espacios como Conspiranoicos, que abordan este problema de manera directa y didáctica.

Esta declaración reabre el debate sobre los límites de la opinión y la difamación en el ámbito público, así como la importancia de actuar contra la difusión de información falsa que puede dañar la reputación de las personas.