"Olviden todo lo que hayan visto de este caso. Borren la imagen que se hayan creado sobre sus protagonistas. Según la sentencia, estuvo a punto de morir. No todo lo que pasó en esa casa está recogido en la sentencia. Hay detalles que sólo Mainat sabe", así arrancaba la tercera temporada de Anatomía de... en laSexta este domingo, 11 de mayo. En la madrugada del 23 de junio de 2020, Ángela Dobrowolski, exmujer del célebre productor, trató de asesinarlo con una sobredosis de insulina con fines aparentemente económicos. Ante la atenta mirada de Mamen Mendizábal, el catalán compartió multitud de confesiones con respecto a su matrimonio, la 'transformación' de la alemana o algunos datos sobre su paso por prisión, donde se encuentra actualmente de forma provisional y sin fianza.
El espacio de Atresmedia reconstruyó aquella noche en la que su exesposa dio hasta 14 viajes de la cocina a la habitación; imágenes que veían la luz públicamente por primera vez. Pero, antes, Josep María Mainat repasaba cómo fue su matrimonio con Dobrowolski: "Compartimos la vida durante diez felices años. El nacimiento de los dos niños fue la culminación de una familia feliz".
El catalán tiene claro cuándo se dio el punto de inflexión en la relación: durante la pandemia. La situación fue empeorando hasta que, un año antes del intento de asesinato, decidieron separarse. En ese instante, Mainat asegura que la actitud de ella empezó a cambiar, y él comenzó a ver que hacía "cosas raras". "El día que le dije que me quería divorciar llamó a la Policía y les dijo que la estaba intentando agredir", explicaba, antes de añadir que "ella se desdijo" cuando las autoridades llegaron al domicilio.
El productor asegura que "la cosa empezaba a desvariar" hasta tal punto que él mismo empezó a pensar que Dobrowolski sufría "brotes psicóticos": "Un día podía enfadarse y coger un equipo de sonido y tirarlo desde el balcón a la calle". Mainar recuerda otra fuerte discusión, la que fue el detonante total de la ruptura: "Un día hubo una discusión bastante fuerte en la que empezó a tirarme cosas como el taburete del piano por la espalda, una silla... y yo vi que iba hacia los cuchillos de la cocina. Fue ahí y no cogió los cuchillos, sino un bote de mermelada y me lo reventó contra la cabeza", relata el productor, que afirma que se quedó "con la cabeza sangrando y no le dije nada, pero me fui de casa y llamé al abogado para decirle que preparase los papeles del divorcio para entregarlos ya".
Mainat cuenta cómo Angela Dobrowolski se convirtió en "una persona diabólica": "Se hizo amiga de putas, traficantes..." #AnatomíaMainat https://t.co/uTmk7odEY6
— laSexta (@laSextaTV) May 11, 2025
Dobrowolski dejó de ser aquella mujer con la que Mainat se había casado años atrás: "Estaba a punto de terminar la carrera y, de repente, se transformó". El productor asegura que la alemana empezó a "tontear con las drogas", con las que "ya había tenido una pequeña historia en el pasado, pero nada especialmente grave": "Sin embargo, esta vez fue in crescendo y la transformó completamente". "Pasó de tomar coca, que ya es grave, a tomar meta y otras drogas más duras que fríen el cerebro", confesó.
Entonces, la vida de Dobrowolski comenzó a estar vinculada a "lo peor del barrio chino de Barcelona como putas, gigolós, traficantes, ladrones, delincuentes...": "Le saltó una chispa y cambió de personalidad, se convirtió en una persona mala, diabólica, delincuente y una que fue capaz de intentar asesinarme".
En septiembre de 2024, la Justicia la condenó a 4 años y 6 meses de prisión, así como a cumplir una orden de alejamiento de un kilómetro durante 8 años y medio, por un delito de lesiones. Y es que, aunque dictaton que sí existió la "intención de asesinar" a Mainat, consideraron que "desistió voluntariamente de la tentativa de asesinato" al llamar al Servei d'Emergències Mèdiques (SEM) esa misma noche. Por lo tanto, este "arrepentimiento espontáneo" rebajó considerablemente la dureza del fallo.
Al final del programa, todavía quedaba un dato desconocido por desvelar. Anatomía de... reveló que Dobrowolski y Rosa Peral, condenada por el crimen de la Guardia Urbana, se hicieron amigas en la cárcel de Brians, pero que "las separaron por mal comportamiento".