Andreu Buenafuente reveló los detalles de su vida tras la cancelación de Late Motiv. Ante los micrófonos de El Faro de la Cadena SER, el presentador y humorista ha dejado caer que Berto Romero le intenta “liar” para hacer una nueva seria, aunque por el momento él dedica su tiempo a un programa de cinco capítulos sobre “cómicos con raíces catalanas, como Gila y Eugenio”. Pero antes de abordar su futuro profesional, dedicó un pequeño momento a esbozar un emotivo recuerdo de su padre: “Yo soy un privilegiado. Mi padre se levantaba a las 7 de la mañana y se iba a vender gallinas”.

El presentador de Reus nunca ha olvidado el ‘calor’ del Mediterráneo, ni siquiera durante sus años en Madrid, aunque la ausencia de mar, humedad y el olor a salitre de su tierra natal se hizo notar en su vida. Su vínculo con él es tal que la canción homónima de Joan Manuel Serrat es una filosofía de vida para él. “Es de las pocas canciones que no aguantan la broma. Yo soy del gremio de los pocos escrúpulos, que diría Sabina, pero nunca he podido parodiar Mediterráneo”, admitió.

Buenafuente no escondió su pasión por la naturaleza y, de hecho, admite que uno de los sonidos predilectos de su banda sonora es el canto de los pájaros. “Cada vez me interesan y me relajan más, aunque una vez entrevisté a un ornitólogo y me quitó un poco el halo romántico”, argumentó el cómico, quien recuerda que este incluso le llegó a decir que podría estar escuchando una “amenaza de muerte” propia de la comunicación de las aves.

Emotivo recuerdo a su padre

Los silbidos propios de los trinos condujeron a los momentos más tiernos de su infancia, cuando su padre, Joan, se deslizaba por su casa canturreando cada mañana mientras se pertrechaba para ir a trabajar. “Fue un niño de la posguerra que sobrevivió gracias a la poderosa arma que es el buen humor. Eso lo he puesto en valor con el paso de los años”, destacó.

En este sentido, Buenafuente se ha definido a sí mismo como un “privilegiado” en comparación con su padre. “Se levantaba a las 7 de la mañana, se ponía su camiseta imperio, se afeitaba y se iba a vender gallinas y a estar con la gente. Le querían mucho porque era un animador social y cuando murió recogimos la tristeza de su ausencia en los demás”, rememoró.

Futuros proyectos

Finalmente, la entrevista llegó al punto presente e incluso se desplazaría un par de pasos hacia el futuro más inmediato de la vida del cómico. Buenafuente, que ya ha dejado atrás la exitosa etapa de Late Motiv, ha admitido que ahora duerme por las noches y subraya con emoción que El Terrat, pese a su venta, sigue existiendo y “sin problemas económicos”. “Yo sigo currando igual”, dijo.

Pero su vida sigue ligada a la televisión y nunca sin olvidar a su inseparable Berto Romero, quien le está intentando “liar” para hacer una nueva serie. Sin embargo, entre tanto, Buenafuente está produciendo un programa de cinco capítulos sobre cómicos con raíces catalanes como Gila y Eugenio.