Día triste y emotivo el de este jueves en Algeciras (Cádiz), aunque mucho más de lo primero que de lo segundo, como no podía ser de otra manera después del asesinato que el pasado miércoles tenía lugar en la provincia gaditana y que la Audiencia Nacional investiga como posible ataque terrorista

Cientos de personas se han congregado en el día de hoy en la plaza principal del municipio para despedir al sacristán Diego Valencia, asesinado la pasada noche en los aledaños de la iglesia de La Palma. En los hechos también resultó herido Antonio Rodríguez, párroco de la capilla de San Isidro y que se encuentra en estado grave pero estable tras haber recibido una puñalada. Una tercera persona presentaba igualmente heridas, aunque sin gravedad.

Así ocurrió el presunto ataque terrorista

Según los testigos de la zona y la información que se ha recabado hasta el momento, el detenido entró en la capilla vestido con una chilaba y golpeó varias imágenes con un machete. El párroco trató de echarle del lugar y una vez que los dos estaban fuera del mismo, el atacante se giró y le apuñaló en el cuello.

El hombre entró gritando en el sitio y comenzó a tirar al suelo imágenes, cruces y velas, según apuntan las fuentes que estaban allí, que sostienen asimismo que el presunto terrorista llegó a subirse al altar del templo.

Habría sido en ese momento cuando el sacristán le obliga a abandonar la iglesia y el atacante le amenaza. Las personas que vieron la escena aseguran que el hombre estaba saliendo por la sacristía cuando se encaró a dos mujeres que estaban allí. El fallecido le emplazó nuevamente a marcharse, pero fue perseguido por el autor de los hechod, quien finalmente acabó con su vida.

Reacciones políticas al asesinato de Algeciras

Las condenas no tardaron en llegar por parte de los responsables políticos, desde el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, hasta el de Andalucía, Juanma Moreno Bonilla. Mucho más controvertido resulta, sin embargo, el mensaje de Vox, quien utilizó el supuesto ataque terrorista para cargar contra los inmigrantes sin distinción alguna.

Testigos de la zona indicaron que el asesino de origen marroquí portaba en una mano el Corán y en otra el arma, hechos que los de Abascal han aprovechado para dar rienda suelta a su discurso.

Distinta ha sido la reacción del PP, quien se ha desvinculado de la visión generalista de la formación ultra y ha pedido “no estigmatizar a un colectivo”. Eso sí, ha lamentado falta de información por parte de Moncloa y ha acusado a Sánchez de no haber informado al líder del partido, Alberto Núñez Feijóo, en este asunto.