El año judicial que comienza se prevé caliente. Las salas de juicio a lo largo y ancho del país acogerán en el banquillo de los acusados a nombres ilustres vinculados a la corrupción del PP como el expresidente valenciano, Francisco Camps; el exministro de Aznar, Rodrigo Rato; el expresidente de la Diputación de Valencia, Alfonso Rus o el también exministro de Aznar y expresidente de la Generalitat, Eduardo Zaplana, para quien se espera que la fecha de juicio por el caso Erial sea antes de que acabe el año. Un juicio donde compartirá acusaciones con otro expresidente valenciano, José Luis Olivas.

Pero además de los clásicos vinculados a la corrupción del PP, que cada año copan las salas de juicios, otros nombres famosos también se sentarán en el banquillo acusados de diferentes delitos. Es el caso del bailarín Rafael Amargo, que está acusado de un delito contra la salud pública y pertenencia a organización criminal y se enfrenta a nueve años de prisión; o la tenista Arantxa Sánchez Vicario y su exmarido. Ambos están acusados de alzamiento de bienes o insolvencia punible, y tienen el juicio en un Juzgado de Lo Penal en Barcelona.

Casos de corrupción

En cuanto a la corrupción, los dos primeros en tener que enfrentarse a la Justicia son Alfonso Rus y Francisco Camps, cuyos juicios comienzan el 23 de enero en la Audiencia Provincial de Valencia y la Audiencia Nacional respectivamente. Rus irá a juicio por la conocida como pieza de los zombis, personas que cobraban sin trabajar, dentro del caso Taula. En el caso de Camps, se enfrenta a dos años y medio de prisión como presunto autor de los delitos de prevaricación y fraude dentro de la pieza del caso Gürtel de Fitur, donde el Gobierno valenciano supuestamente contrató a dedo a Orange Market, la empresa de Francisco Correa.

En mayo 2023 también llegará a juicio la primera pieza del caso Lezo por la operación de compra por el Canal de Isabel II de la colombiana Inassa. Eso sí, este juicio se celebra sin el principal investigado del caso, el expresidente madrileño, Ignacio González. Este juicio comenzará tan solo un día después de que termine el de Camps.

Otro que no tiene fecha de juicio, pero que se espera para este año, es Rodrigo Rato. El que fuera ministro de José María Aznar se enfrenta a 70 años de cárcel por once delitos contra la Hacienda Pública, así como de blanqueo de capitales, insolvencia punible, corrupción y falsedad documental por la gestión que hizo de su fortuna personal presuntamente a través de paraísos fiscales y empresas fantasma.

Las salas para macrojuicios de la Audiencia Nacional también tiene fechar para otro juicio histórico, el que juzgará a los miembros de la banda de narcotraficantes que reinó en la noche del Madrid de los 90: ‘Los Miami’. En este juicio, 92 personas están acusadas de delitos continuados contra la salud pública, blanqueo de capitales, falsedad documental, contra la Hacienda Pública, falsificación de moneda y tenencia ilícita de armas de fuego.

El Procés sigue vivo

Y otro clásico, junto con la corrupción, son los juicios vinculados al Procés. El 10 de febrero, la expresidenta del Parlament, Laura Borràs, se sentará en el banquillo en la causa que la acusa de fraccionar contratos para favorecer a un amigo, Isaías Herrero, cuando dirigía la Institució de les Lletres Catalanes (ILC). Está acusada de los delitos de prevaricación y falsedad documental.

Además, los días 14, 15 y 16 de marzo de 2023 volverán a ser juzgados Lluís Corominas, Anna Simó, Ramona Barrufet y Lluís Guinó, miembros de la mesa del Parlament, cuyo juicio fue anulado por el Tribunal Supremo. Todos ellos están acusados del delito de desobediencia por permitir la tramitación de las leyes que constituyeron las bases jurídicas del Procés.