La Fiscalía Anticorrupción está investigando el gasto de varias tarjetas de crédito utilizadas por el rey Juan Carlos I, la reina Sofía y varios familiares. Se tratan de tarjetas vinculadas a cuentas de las que ninguno de ellos son titulares y cuyo origen de los fondos es incierto. Lo único que se conoce, por el momento, dos dos personajes que sería sus testaferros: un millonario mexicano -quien podría haber pagado la yegua de Vicotria Federica- y un coronel.

En este sentido, el diario El Mundo ha tenido acceso a la declaración del empresario mexicano Allen Sanginés-Krause, exdirectivo de Goldman Sachs, quien ha asegurado ante la Fiscalía Anticorrupción que los ingresos que hacía al rey emérito Juan Carlos I y la familia real no eran comisiones, sino "atenciones" que quiso tener con un amigo.

Entre los “pagos” que ha explicado, se encontrarían “regalos” como la yegua para la sobrina de Felipe VI e hija de Elena de Borbón, Victoria Federica. La Fiscalía del Tribunal Supremo tiene pruebas de que esa compra no fue declarada a la Agencia Tributaria por el monarca ni el resto de los supuestos beneficiarios.

Las tarjetas

Ni el rey Felipe VI, ni Letizia, ni la princesa Leonor, ni la infanta Sofía han sido beneficiados por los activos de las tarjetas de crédito, pero sí otros familiares directos del Emérito, según el citado periódico. Los movimientos datan de los años 2016, 2017 y 2018; y entre las compras, figuran viajes a Londres, donde Sofía mantiene su residencia habitual.

Anticorrupción ha enviado comisiones rogatorias a varios países para profundizar en el origen de los fondos y no solo en el gasto, pues el dinero procede del extranjero.

Pese a que se mantienen a la espera, la Fiscalía ya ha detectado indicios de posibles delitos fiscales al tratarse de incrementos de renta de la reina Sofía superiores a 120.000 euros.