El escándalo que salpica a la Casa Real no deja de sumar capítulos. Este domingo se añade uno más con la publicación, por parte de El Confidencial, de que se investiga si la yegua de Victoria Federica de Marichalar y Borbón, llamada Dibelunga, fue pagada por el empresario mexicano amigo y presunto testaferro de Juan Carlos I implicado en la trama de las tarjetas opacas.

Allen Sanginés-Krause habría costeado, tanto la adquisición del animal, como su mantenimiento, manutención y adiestramiento durante años.

Dibelunga fue comprada en 2015 en la cuadra española Maihorses y Victoria Federica se estrenó poco después con ella en los circuitos hípicos. Zarzuela aseguró entonces que había sido la infanta Elena la que la había adquirido, pero no dio más explicaciones alegando que Victoria Federica era menor de edad.  

Según el citado diario "la Fiscalía del Tribunal Supremo maneja ahora pruebas de que la compra de la yegua y otras cuantiosas facturas relacionadas con el adiestramiento y manutención del animal fueron pagadas por la Casa Real con dinero del eesario mexicano".

Allen Sanginés-Krausee  figura en la génesis del dinero que sufragó las tarjetas opacas al fisco, según las conclusiones de Anticorrupción. Nació en 1959 y tiene también la nacionalidad británica. La mayor parte de su vida ha trabajado en Goldman Sachs, donde fue el máximo responsable de este banco de inversión, tanto en México como en Rusia.

Fue presidente de Milicom y es el principal accionista de varios fondos inmobiliarios, además de dueño del castillo de Killua, sito en Irlanda.