El ex tesorero del Partido Popular Luis Bárcenas ha declarado este viernes ante el juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz. El ex senador conservador ha apuntado hacia "todos" los ministros de Fomento y Medioambiente de los gobiernos populares, entre los que ha mencionado a Francisco Álvarez Cascos. Ha admitido ante el magistrado que todos ellos trataban con donantes de la Caja B de la formación para hablar sobre adjudicaciones públicas. 

 

Bárcenas ha comparecido ante el juez de manera presencial, pues disfrutaba de unos días de permiso, en el caso que investiga Santiago Pedraz sobre si las inyecciones de dinero que se hacían a la contabilidad paralela del Partido Popular tenían como fin la obtención de adjudaciones

Según relatan fuentes jurídicas a Europa Press, el ex tesorero conservador ha ratificado la confesión que remitió, a través de un escrito, a la Fiscalía Anticorrupción el pasado mes de febrero. En el escrito, Bárcenas adujo que muchas de las donaciones eran finalistas

Bárcenas ha respondido a las preguntas de todas las partes presentes en la sala, a excepción del abogado del Partido Popular. Sin embargo, durante el interrogatorio, el ex senador del PP por Cantabria no supo precisar la identidad de la persona que habría pagado para según qué adjudicación. Lo que sí ha explicado es que esta información se encontraba en la documentación que le sustrajo el aparato parapolicial de la Operación Kitchen.

 

En este sentido, el extesorero ha destacado que todos y cada uno de los ministros de Fomento y Medioambiente de los gobiernos del Partido Popular mantuvieron conversaciones con empresarios donantes a la contabilidad B para tratar las mencionadas licitaciones. 

Ha manifestado que los pagos a la caja B otorgaban la capacidad de reunirse con los responsables de las administraciones licitadores. De hecho, según la versión de Bárcenas, este era el principal objetivo de estas donaciones. 

Bárcenas ha expuesto un caso concreto durante su testifical. El extesorero ha recordado el momento en el que su predecesor, el fallecido Álvaro Lapuerta, acudió al director general de Carreteras del Estado y ministro en aquella época, Francisco Álvarez Cascos, para abroncarle. El motivo de la discusión giró en torno a la persona a la que debía dirigirse siempre para esos asuntos, es decir, el propio Lapuerta. 

El ex responsable de las finanzas del PP agregó que había surgido una disputa interna en Génova y Madrid por las obras de una carretera de la zona norte de la región.