El juicio contra José María López por los presuntos abusos sexuales cometidos contra su compañera de concurso en Gran Hermano, Carlota Prado, en 2017, ha sido suspendido este martes después de que la víctima, que estaba citada como testigo, no haya asistido por "problemas psiquiátricos" de la joven, según ha alegado su abogado.

La jueza ha suspendido la sesión, sin señalar una nueva fecha, al considerar que el testimonio de Carlota Prado "es preciso" para el desarrollo de la vista oral, cuya segunda sesión estaba prevista para el próximo viernes. La Fiscalía pide una pena de dos años y medio de cárcel contra el acusado, más 6.000 euros de indemnización.

"Problemas psiquiátricos de gravedad"

El juicio estaba programado a las 9.30 de la mañana de este martes e iba a ser la primera sesión contra José María López por los hechos ocuridos la madrugada del 4 de noviembre de 2017. El acusado llegó al juzgado de lo Penal Número 18 de Madrid pasadas las 9.15, pero la víctima nunca lo hizo. Según explicó su abogado, sufre “problemas psiquiátricos de gravedad”.

La jueza, María Dolores Palmero, ha decidido suspender el juicio y ha pedido al abogado de Carlota Prado un informe psiquiátrico del especialista que está tratando a la joven. “La madre me ha dicho que está gestionándolo esta misma mañana”, ha explicado el letrado durante los apenas diez minutos que ha durado la vista, según adelanta El País.

Según ha explicado el abogado, ya fuera de la sala, “la víctima desde 2017 ha empeorado gravemente su salud mental. Ahí están las visitas a psiquiatras, el tratamiento que ha tenido y el estado en el que está, ha empeorado mucho”. El acusado, que no ha hecho ninguna declaración ni a la entrada ni a la salida del juzgado, ha defendido su inocencia desde el primer momento. La Fiscalía solicita para él dos años y seis meses de prisión, la prohibición de comunicarse o acercarse a la víctima a menos de 500 metros y durante cuatro años, además de una indemnización de 6.000 euros por los daños morales causados a la víctima, una cantidad “idéntica” a la que pide la productora del programa “por los daños ocasionados a raíz de la exhibición a la perjudicada de las imágenes grabadas”.

Comunicado de Zeppelin

La acusación particular solicita siete años de prisión, ese mismo periodo para el alejamiento del acusado y 100.000 euros por daños morales a Prado (siendo responsable civil subsidiaria la productora, Zeppelin) y otros 100.000 adicionales por el mismo motivo a Zeppelin.

La productora de Gran Hermano es parte en el proceso contra José María López como responsable civil subsidiaria del acusado, como testigo y como responsable civil por daños morales a Carlota Prado, por la exhibición de la grabación de lo que ocurrió aquella noche en la cama de la llamada “habitación grande” de la casa de Guadalix de la Sierra.

En un comunicado, la productora dice que ha habido una “anomalía procesal” porque "se ha mezclado en este mismo proceso una petición de responsabilidad civil (multa) a Zeppelin por daños morales. Existe un representante legal de la productora en el juicio dando respuesta a esta petición, aunque cualquier reclamación económica que no se deriva bajo ningún concepto de un hecho delictivo debe ser reclamada por la vía civil”.

Sí López pueda condenado y no poder hacer frente a esa responsabilidad económica, entonces “será Zeppelin quien garantice que la víctima recibe su indemnización en caso de insolvencia”, se añade en el comunicado, que también informa de que la productora “ya ha depositado el importe de la cuantía que se le podría pedir al potencial condenado, de cara a facilitar el proceso”. Una cantidad que asciende a 133.333 euros.