Las altas temperaturas experimentadas durante la temporada de verano han llevado a los embalses españoles a experimentar una situación crítica, situación que, a pesar de las recientes precipitaciones no consigue remontar. De acuerdo con el Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico, la reserva hídrica española se encuentra actualmente en el 34,2% de su capacidad, anotando una caída del 0,8% con respecto a los datos de la semana anterior.

Situación crítica en el sur

De esta forma, los embalses del país han perdido un total de 462 hectómetros cúbicos en apenas una semana. De acuerdo con el informe, las precipitaciones que han afectado a la vertiente atlántica han sido escasas. Las reservas más preocupantes tienen lugar en la cuenca del Guadalquivir, con un 21% de su capacidad total, es decir, menos de un cuarto de sus reservas, para abastecer a la población de Sevilla y alrededores.

A los problemas de sequía en la cuenca del Guadalquivir se suman otros en el sur de España como el Guadiana, con un 23,9% de su capacidad; el Guadalate-Barbate, con un 24% y la cuenca del Segura, en la provincia de Murcia, con un porcentaje del 35,2%.

Reserva Hídrica

La vertiente Atlántica está menos afectada

Las precipitaciones han afectado principalmente a la vertiente Atlántica que ha recuperado parte de sus reservas hídricas. En el mejor de los casos, las reservas menos afectadas por la sequía corresponden a las cuencas internas del País Vasco, con un 71,4% de su capacidad; las del Cantábrico oriental, al 69,9% de su llenado total y el Tinto, Odiel y Piedras, al 65,9%.

No obstante, las precipitaciones de las últimas semanas no están consiguiendo recuperar la esquilmadas reservas hídricas a causa de las sucesivas olas de calor que han acosado a la Península y al resto de Europa durante la temporada de verano.