El Papa León XIV ha invitado a reconocer como "prójimo" a todas las personas, sin importar su nacionalidad, lugar de procedencia o religión, en una homilía centrada en la parábola del buen samaritano que, a su juicio, "provoca contra el riesgo de una fe acomodada" y desafía a la actualidad y sacude la tranquilidad de las conciencias. Unas palabras que llegan, precisamente, en un contexto internacional delicado, con diferentes conflictos bélicos y crisis internacionales abiertas, especialmente la que se está viviendo con el genocidio en Gaza, sobre el que el propio Papa ya se ha pronunciado anteriormente para pedir la paz.
"A veces nos contentamos solamente con hacer nuestro deber o consideramos como nuestro prójimo sólo a quien es de nuestro círculo, a quien piensa como nosotros, a quien tiene la misma nacionalidad o religión; pero Jesús invierte la perspectiva presentándonos un samaritano, un extranjero y herético que se hace prójimo de aquel hombre herido. Y nos pide que hagamos lo mismo", ha señalado este domingo el Pontífice, que ha oficiado su primera misa en el Castel Gandolfo, donde está pasando sus vacaciones, en la parroquia de San Tomás de Villanueva, ubicada en la plaza principal de la localidad.
Con estas palabras, el Papa León XIV ha explicado que la parábola del buen samaritano habla de la mirada que Dios ha tenido hacia la humanidad, para que la sociedad "aprenda a tener sus mismos ojos, llenos de amor y compasión hacia los demás" y ha recordado las veces que el Papa Francisco dijo que "Dios es misericordia y compasión" y que Jesús "es la compasión del Padre hacia los fieles, convirtiéndose "en el buen samaritano que fue al encuentro".
"¿Qué hacemos nosotros? ¿Vemos y pasamos de largo, o nos dejamos traspasar el corazón como el samaritano?" ha preguntado el Pontífice a los miles de fieles presentes en la parroquia, para después recordar que la parábola desafía "por el hecho de que Cristo es manifestación de un Dios compasivo". "Creer en Él y seguirlo como sus discípulos significa dejarse transformar para que también nosotros podamos tener sus mismos sentimientos; un corazón que se conmueve, una mirada que ve y no pasa de largo, dos manos que socorren y alivian las heridas, los hombros fuertes que se hacen cargo de quien tiene necesidad", ha indicado.
León XIV llegó a las Villas Pontificias de Castel Gandolfo el pasado domingo 6 de julio, donde se alojará hasta el próximo 20 de julio. En este lugar, que el Papa Juan Pablo II llamó cariñosamente "Vaticano número dos", ha celebrado la Santa Misa este domingo, mientras que el 20 de julio la celebrará en la Catedral de Albano, que había sido asignada al entonces cardenal Prevost como Iglesia titular en el Consistorio para la creación de los cardenales.