El padre Ángel instaló en la Iglesia de San Antón una cesta gigante de Navidad para acoger donaciones a mediados del mes de noviembre. Esta iniciativa, de Mensajeros de la Paz y él mismo, su fundador, fue presentada como la primera donación de 2.000 kilos de comida que sería destinada a la Gran Recogida de Alimentos y donada a los bancos para poder abastecer a los más necesitados.

Aproximadamente tres semanas después, el párroco de la Iglesia de San Antón confiesa en declaraciones a ElPlural.com que su gran proyecto ya ha conseguido recoger más de cinco toneladas de alimentos. “Las colas del hambre tienen muchos nombres y muchas historias detrás”, confesó por aquel entonces y ahora relata que las donaciones han sido muy numerosas. Incluso cuenta que entre las cosas más curiosas que han llegado se encuentran dos maquinas de coser antiguas, que se pondrán a disposición de aquellos que las necesiten. “Da lo que puedas y pide lo que necesites, este es el lema de la campaña y deja muy claro su objetivo”, ha señalado el padre Ángel.

El fundador de Mensajeros de la Paz se muestra muy esperanzado con la llegada de la vacuna para poner fin a esta pandemia del coronavirus, pero apunta que no es muy diferente a lo que ha ocurrido a lo largo de la historia: “Esta pandemia no es culpa del Gobierno y otras autoridades, sino que son gajes del oficio porque desde que el mundo es mundo ha habido constantes catástrofes, como el diluvio universal, las siete plagas o enfermedades como la malaria, que el hombre siempre ha conseguido superar”. Aunque sí recuerda que “lo que se ha llevado no lo va a devolver nadie”.

No obstante, indica que “hay demasiados agoreros que creen que todo se termina y todo va mal”, por eso recuerda que “sin negar la realidad, hay que tener la esperanza de que se va a salir”. Para la celebración de las fiestas de Navidad más atípicas, el padre Ángel cree que se va a compartir más que en otras ocasiones porque la pandemia nos ha marcado: “Vamos a compartir lo que tiene uno con los demás”. Para ello pone el ejemplo de la buena acogida que ha tenido la recogida de alimentos en su templo: “Esto es una señal más de que la gente es generosa y solidaria y cómo todos intentamos paliar esta situación”.