La "pérdida de confianza" en Diego Pérez de los Cobos, alegada por Interior para su destitución, no sólo se debe a su negativa a informar con claridad sobre la investigación del 8-M y el brote del coronavirus. Según fuentes de la Guardia Civil, citadas por El Periódico de Catalunya, ésta era la tercera vez que desde la Comandancia de Madrid que dirigía el coronel se realizaban polémicas actuaciones y filtraciones.

Cuando la directora general de la Guardia Civil, María Gámez, firmó la propuesta de destitución de Pérez de los Cobos ya "llovía sobre mojado". La última crisis en torno al coronel fue su "silencio intencionado" sobre la filtración, el jueves 21, de parte del polémico atestado elevado a la jueza Carmen Rodríguez- Medel, que investiga una denuncia por el permiso concedido para la manifestación del 8-M en Madrid, en medio del brote de coronavirus.

Según esas fuentes, Pérez de los Cobos informó, motu propio, a la Dirección General de que el juzgado de Instrucción 51 de Madrid había comisionado a la Guardia Civil como policía judicial para el caso del 8-M, y tambbién que la jueza había mandado detener la investigación hasta que se levantara el estado de alarma. 

La cúpula de la Guardia Civil tenía conocimiento de una videoconferencia con la jueza solicitada por el capitán y el teniente que firman el atestado, que recoge inexactitudes, posibles falsedades y juicios de intenciones.

Los anteriores roces con Pérez de los Cobos

Pero la instrucción del 8-M no fue el único roce con la cúpula de Interior. Dos días antes del domingo 24, el de la destitución, desde la Comandancia de Madrid se filtró una orden, con fecha 13 de marzo, dirigida a los guardias que custodian la vivienda en Galapagar (Madrid) del vicepresidente del Gobierno Pablo Iglesias para retirar pancartas y banderas de España.

La orden, según las citadas fuentes, no pretendía proteger al vicepresidente de quienes organizan caceroladas, sino que se trató de una instrucción del propio Pérez de los Cobos por una campaña del sindicato policial Jusapol, con integrantes muy cercanos a Vox, que, tras hacerlo ante el Congreso, se fueron a manifestar con pancartas y enseñas rojigualdas ante el domicilio de Iglesias e Irene Montero.

El coronel ordenó requisar un vídeo sobre Iglesias

El 24 de abril, vecinos de la urbanización La Navata, en el término de Galapagar, difundieron un vídeo grabadocon un móvil en una famosa tienda de alimentación del barrio de Pablo Iglesias, en el que se le veía llenando un carrito sin llevar mascarilla, y a algún vecino insultándole.  El criterio del Gobierno sobre el incidente fue que las Fuerzas de Seguridad no hicieran nada, salvo que un juez ordenara investigar los hechos. Pero Interior supo que el coronel Pérez de los Cobos había enviado a los guardias  civiles a pedir las imágenes de las cámaras de seguridad del comercio, sin que hubiera investigación judicial abierta. 

El informe sobre el 8-M fue la gota que llenó el vaso y que llevó a la decisión de la directora general, María Gámez, de destituir a Pérez de los Cobos.