Los médicos internos residentes (MIR) de la Comunidad de Madrid continúan este lunes la huelga indefinida iniciada el pasado 13 de julio, aunque a diferencia de los lunes precedentes no realizarán manifestación por el centro de la capital, como "muestra de voluntad" para el avance de las negociaciones con la Consejería de Sanidad y debido a la "desfavorable evolución" del coronavirus que vuelve a poner en peligro la salud pública en la región.
El comité de huelga se reunió el jueves y el viernes con las Consejerías de Sanidad y de Hacienda para continuar la negociación tras haber sido recibidos por la presidenta regional, Isabel Díaz Ayuso, en la sede del Gobierno.
No hay aún un compromiso firmado
En las negociaciones se avanzó en algunas de las reivindicaciones de los residentes, pero no se resolvieron otras peticiones que implican incremento de gasto. Según explicó Sanidad, "se ha avanzado en el compromiso en lo relativo a la jornada, organización, formación y algunos aspectos retributivos. Desde el punto de vista económico ha habido una primera toma de contactos sin haber podido acercar posturas. Se emplazan a seguir hablando para solucionar el conflicto".
Por su parte, los MIR explicaron que han logrado "algún avance significativo, pero sin poder firmar un documento de compromiso ni desconvocar la huelga" por falta de acuerdo en los aspectos económicos, según Pedro Viaño, miembro del comité de huelga.
Los médicos denunciaron que se vulneró su derecho de huelga
La huelga indefinida de los Médicos Internos Residentes (MIR) empezó el pasado 13 de julio y se ha celebrado cada lunes en jornada ordinaria, acompañada de una gran manifestación, con seguimientos de alrededor de un 40%, según la consejería de Sanidad, y del 90-95% según los convocantes.
Aunque la huelga también está convocada todos los días de la semana en horarios de guardia, la Comunidad dictó servicios mínimos del 100% para las guardias, que fueron recurridos judicialmente por ser "excesivos y vulnerar el derecho de huelga".
Sus reivindicaciones
Los MIR reclaman que se les garantice el descanso tras la guardia de 24 horas, elevar la retribución económica por hora de guardia; una adecuada supervisión de los residentes más jóvenes por un médico durante la guardia, así como "un mínimo de días de formación a la semana". También piden regular "un mínimo de congresos científicos, un mínimo de rotación externa o de días para cursos de formación continuada", además de tener un lugar adecuado de descanso durante la guardia, poniendo fin a las llamadas "camas calientes" compartidas por varios residentes en grandes hospitales.
