Tres de los cinco miembros de La Manada ya están en libertad. Minutos después de las 18:00 horas de este viernes, los condenados a nueve años por un delito de abusos sexuales continuados abandonaban la cárcel de Pamplona.

Ya están en libertad provisional José Ángel, más conocido como El Prenda, Jesús Escudero Domínguez y Ángel Boza Florido.

Después, a las 19:30 horas, el centro penitenciario de Alcalá Meco abría sus puertas para que salieran los otros dos miembros de La Manada. Hablamos de Alfonso Jesús Cabezuelo y Antonio Manuel Guerrero, el militar de Unidad Militar de Emergencia (UME) y el Guardia Civil, respectivamente.

De la salida de estos dos condenados no hay imágenes ya que su taxi ha sido escoltado por dos coches de la Guardia Civil, que ha impedido que los medios congregados a las puertas de la prisión madrileña tomarán imágenes del momento.

Ahora, el taxi en el que viajan tiene que salir inmediatamente de la Comunidad de Madrid pues, una de las medidas cautelares impuestas para su libertad es no poder pisar la capital donde vive su víctima.

Así, los cinco miembros de La Manada ya están en libertad, y su salida de la cárcel ha coincidido con las multitudinarias manifestaciones de mujeres que recorren media España. Poco antes, se hacía público que los cinco de habían depositado sus fianzas de 6.000 euros decretadas por la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Navarra.

El abogado de tres de La Manada, entre ellos El Prenda, aseguró que les iba a costar recaudar los 6.000 euros porque todos vienen de “familias humildes y trabajadoras”. Sin embargo, lo han conseguido en 24 horas.

Esta mañana, la familia del guardia civil Manuel Guerrero Escudero, recluido en la prisión madrileña de Alcalá Meco, consignaban la fianza, y posteriormente lo hacían los representantes de los otros cuatro integrantes de la Manada.

Cumplen dos años en prisión

El jueves, la Sección Segunda de la Audiencia de Navarra acordaba la libertad provisional para La Manada tras el pago de una fianza de 6.000 euros

Lo decidieron teniendo en cuenta que se cumplen dos años desde la entrada de los cinco jóvenes en prisión preventiva, el tiempo máximo que un acusado suele pasar en la cárcel hasta ser condenado o absuelto, por lo que se ha acordado su puesta en libertad.

Es cierto que La Manada fue condenada entre gran polémica a nueve años de prisión por abusos sexuales, pero también lo es que esa condena no es firme pues los jóvenes presentaron recurso. Y es aquí donde está la clave: podían solicitar su puesta en libertad hasta que se resolviera el recurso y la sentencia fuera definitiva. Dicho y hecho.

La ley contempla que, al cumplirse estos dos años, se puede pedir una revisión para ampliar el tiempo incluso hasta la mitad de la condena, la mitad de los nueve años. Pero la defensa pidió su libertad.

Ahora, tras esta decisión de la Justicia, el caso de La Manada vuelve a despertar polémica y críticas porque hay que recordar que el recurso sobre la sentencia interpuesto por la defensa de los agresores, no se revolverá hasta septiembre u octubre. Hasta entonces, los cinco de La Manada estarán en libertad provisional.